Despierta tu poder

Emmanuel Cestaro

Fragmento

1
¿POR QUÉ ESCRIBÍ ESTE LIBRO?

Escribí este libro porque me di cuenta de que era el que me hubiese gustado leer en aquel momento de mi adolescencia en que nada parecía salir bien.

Observaba mi vida y había algo que no quería para mí. Tenía 18 años y solo encontraba miedo, soledad, timidez y, sobre todo, las preocupaciones y las preguntas sobre si todo aquello, que me afligía tanto, mejoraría. Había vivido durante toda mi infancia conflictos en las escuelas, dificultades para aprender, sucesos inesperados de robos repetidas veces y muchos problemas para comunicarme y ser quien quería ser.

En este entonces, luego del cansancio de ver que todo seguía igual, empecé a tomar la vida como un juego. Me di cuenta de que el miedo era lo que me paralizaba en cada situación y no me dejaba vivirla como quería. Estaba saliendo de una relación amorosa que había idealizado por completo y, destrozado, me apoyé en diferentes libros para comprender mejor el plano espiritual y el análisis de las emociones.

Han pasado los años. Con la información que fui recopilando, pude ver lo que no quería y, a partir de ahí, tener más claro lo que sí quería. Con el tiempo, la desesperanza fue desvaneciéndose; apareció la certeza de que había algo más en esta vida, a lo cual no le encontraba explicación. Se transformó en una convicción sobre cómo tener una vida inspirada y disfrutar al máximo de todo.

En aquel entonces, y en todas las circunstancias que se iban dando, la vida empezó a mostrarme que había algo que, en realidad, sí estaba mejorando. Fue suficiente para hacer crecer, de manera notable, mi creencia. Seguí jugando con este “poder” para escapar de mi realidad anterior. El hábito de esta conducta me hizo dar cuenta de que mi realidad, luego de unos meses, había cambiado por completo. En muy poco tiempo, ya no hubo soledad, ni miedos ni peleas ni conflictos sociales, nada que me hiciera sentir mal.

Mi vida fue cambiando, aun con momentos de caídas emocionales y resultados inciertos.

Me enfoqué hacia lo que quería hacer con mi vida. Terminé mis estudios de Electromecánica, pero supe que no era lo que pretendía, y estudié Licenciatura en Nutrición, ya que había sufrido sobrepeso en la niñez, lo que me había marcado mucho. Enfoqué mis estudios un 50% en nutrición y otro 50% en libros de autoayuda, espiritualidad, metafísica y todo lo que potenciara mi conocimiento sobre quién soy.

Después de más de diez años con estas lecturas, comprendí que la nutrición y las emociones estaban totalmente relacionadas. Entendí que las soluciones llegan de la mano de aprender a valorarse; creer que lo que buscamos, lo que amamos, lo que vinimos a realizar en este mundo, tiene un fin que llenará de inspiración este bello camino de la vida. Solo que ese fin no es la meta en sí misma, sino el camino que recorremos.

Quiero transmitir cómo conectarnos con esta energía que crea mundos, cómo romper miedos, preocupaciones y creencias limitantes que el sistema y nuestro ego hacen que persistan en nuestras mentes. Liberarnos por completo de ataduras emocionales y aprender a practicar el desapego. Y, sobre todo, aprender a pensar y así poder crear o atraer lo que queremos en nuestras vidas, cambiando la frecuencia vibratoria de energía que proviene de la “necesidad” a la “gratitud”, y erradicar todo tipo de pensamientos negativos para darles poder a los que generan la abundancia.

Este no es un libro para leer y guardar, sino para resaltar todos los párrafos o ideas que sientas que pueden ayudarte. Para leerlos en un futuro. La idea es brindarte toda la información para lograr un resultado positivo en tus pensamientos y emociones. Intentaré mostrarte lo valiosa que es tu vida, y lo increíblemente poderosa que es la energía que llevas dentro.

Está intencionado de tal forma que, cuando abras el libro, puedas conectarte con el contenido de inmediato, para que se relacione con tu situación actual. En cada momento de confusión o duda, puedes abrirlo durante el día o antes de ir a dormir y observar la señal que estás emitiendo al universo en ese instante.

No me senté a escribir con la obligación de terminarlo, sino que elegí las ocasiones en que más conectado me sentía con mi ser. Utilicé cada momento de inspiración para sentarme a escribir. Soy consciente de que estamos compuestos por nutrientes, pensamientos y emociones. Soy licenciado en Nutrición y tengo la creencia de que mejorar la alimentación sin mejorar los pensamientos y emociones, y sin un propósito que te haga mantener una vida inspirada, no logrará los resultados deseados. Ya que lo que deseamos, en el fondo de nuestro corazón, es sentirnos realizados; no solo sentirnos bien por cómo nos alimentamos, y mucho menos ver solo una mejora en un espejo o en la balanza.

Creer en mí en los momentos negativos fue lo más valioso que tuve en esta vida, y se potenció cuando observé la relación entre esa creencia y el resultado. Cuando observamos que una idea, una emoción o una imagen mental se materializa al poco tiempo, esa creencia aumenta. Y así crecen nuestros sueños y disminuye el tiempo para alcanzar el resultado. Dicho de otra manera, es esa creencia positiva la que aleja las creencias negativas y cambia el entorno de nuestras vidas.

Te compartiré la información necesaria para iniciar un cambio positivo en tu vida, orientándolo hacia donde tu intuición te guíe.

2
ALCANZAR EL DESPERTAR Y VIVIR EN EL AHORA

Mira tu vida: el precio de no enfocarte en el ahora es el exceso de preocupaciones por pensar en tu pasado e intentar controlar tu futuro. Cuando ese futuro llega, tus metas siguen pendientes del ayer y del mañana.

Durante muchísimos años, en innumerables situaciones, no valoré el momento más importante: el ahora. Enfocaba la atención en un tiempo que no es verdaderamente real —el futuro—, ya que cuando ese futuro llega, continuamos queriendo controlarlo. Hay también otras situaciones en las cuales, en el afán de controlar todo en el presente, nos olvidamos de disfrutar; otros siguen pensando en lo que alguna vez vivieron, sin valorar lo que les está pasando ahora.

Quizá no sea tu situación, y actúas viviendo en el ahora; en ese caso, eres una antena de energía que contagia esas ganas y esa llama a todas las personas que están a tu alrededor.

Me di cuenta de que no vivía el momento, no disfrutaba el ahora, vivía queriendo tener algo, y cuando lograba ese “algo” tan anhelado, confirmaba que esa no era la meta, q

Suscríbete para continuar leyendo y recibir nuestras novedades editoriales

¡Ya estás apuntado/a! Gracias.X

Añadido a tu lista de deseos