El 2 de julio de 2022, dos delincuentes se disponen a robar en una importante joyería de Ginebra. Un incidente que dista mucho de ser un vulgar atraco. Veinte días antes, en su lujosa casa de diseño rodeada de bosques, Sophie Braun se prepara para celebrar su cuadragésimo cumpleaños. La vida le sonríe, disfruta de su familia, de su hogar y del éxito en su trabajo, pero su idílico mundo está a punto de tambalearse. Su marido anda enredado en sus pequeños secretos. Su vecino, un policía de reputación irreprochable, se ha obsesionado con ella y la espía hasta en los detalles más íntimos. Y un misterioso merodeador le hace un regalo que pone su vida en peligro. Serán necesarios varios viajes al pasado, lejos de Ginebra, para hallar el origen de esta intriga diabólica de laque nadie saldrá indemne. Un thriller con un ritmo y un suspenso estremecedores, que nos recuerda por qué, desde La verdad sobre el caso Harry Quebert, Joël Dicker es un fenómeno editorial en todo el mundo, con más de veinte millones de lectores.
La crítica dijo:
«Una voz napoleónica, que no escribe, boxea».
Laura Fernández, El Cultural
«El arte y la destreza de un contador de historias nato, de alguien que parece haber nacido con el don de envolver a quien lo lea con su narración».
Lorenzo Silva
«El suizo que resucita las librerías».
Jesús Ruiz Mantilla, El País Semanal
«Llega el fenómeno Dicker. El sucesor de Stieg Larsson y E. L. James: entretenimiento en vena».
Antonio Lozano, La Vanguardia
«Elprincipito de la literatura negra contemporánea [...]. El niño mimado de la industria literaria, el tipo de buena presencia que estaba llamado a revolucionar el thriller contemporáneo».
Jesús Merino López, GQ
«Su secreto, la elaboración de tramas adictivas que se alejan del best seller convencional. [...] Dicker se reafirma como un hábil generador de atmósferas y de intrigas vertiginosas, con constantes vueltas de tuerca y en las que no hay ni un minuto para el descanso».
Beatriz Martínez, El Periódico de Catalunya
«Joël Dicker se confirma como el autor de una obra que cumple lo que Patricia Highsmith acuñó cual máxima: “Si vas a escribir, no aburras”».
Karina Sainz Borgo, ABC
«Un verdadero maestro de las ilusiones».
Elle
La crítica ha dicho:
«Dicker sigue escribiendo novelas de esas que te hacen parar el tiempo. [...] En eso Dicker es un especialista y me da envidia, mucha envidia».
Andrés Rodríguez, Forbes
«Dicker se ha convertido en un maestro de los saltos en el tiempo, los giros de guion, los finales sorprendentes y, en general, las novelas que te atrapan desde la primera página».
Jorge Coscarón, Esquire
«El nuevo rey de la novela negra. [...] Dicker es quirúrgico a la hora de descifrar el lado oscuro de la naturaleza humana».
Caio Ruvenal, ICON - El País
«Un animal salvaje promete deleitar a sus seguidores».
RTVE
«Una lectura para añadir un poco de suspense a las sofocantes noches de julio».
La Razón **libro del día**
«Un thriller con un ritmo y un suspense sobrecogedores que lo reivindica como un auténtico mago del suspense».
Juanjo Villalba, Men's Health
«El arte y la destreza de un contador de historias nato, de alguien que parece haber nacido con el don de envolver a quien le lea con su narración».
Lorenzo Silva
«Llega el fenómeno Dicker. El sucesor de Stieg Larsson y E. L. James: entretenimiento en vena».
Antonio Lozano, La Vanguardia
«Dicker se reafirma como un hábil generador de atmósferas y de intrigas vertiginosas, con constantes vueltas de tuerca y en las que no hay ni un minuto para el descanso».
Beatriz Martínez, El Periódico de Catalunya
«Un maestro de la trama y de los desenlaces imprevisibles. Sabe sorprenderte auncuando ya estás prevenido sobre ello. Me he tragado [Un animal salvaje] como agua fresca».
Pere Sureda, Público
«Dicker volverá a batir récords y superará su marca personal de más de 20 millones de lectores. [...] Un thriller con un ritmo y un suspense sobrecogedores».
Begoña Alonso,Elle
«Novelas que se leen al ritmo de 100 páginas por sentada. [ ] Pero algo se mueve y se vuelve más complejo en el mapa del autor suizo con cada libro que pasa»
Luis Alemany, El Mundo