
ANH DO
Ilustraciones de Jeremy Ley
Traducción de Mireia Rué



Título original inglés: Ninja Kid.
Autor: Ahn Do.
© del texto: Anh Do, 2018.
© de las ilustraciones: Jeremy Ley, 2018.
© de la traducción: Mireia Rué, 2019.
© de esta edición: RBA Libros, S.A., 2019.
Avda. Diagonal, 189 - 08018 Barcelona
rbalibros.com
Primera edición: marzo de 2019.
RBA MOLINO
ref.: ODBO435
ISBN: 978-84-272-1787-4
Realización de la versión digital · El taller del llibre
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uno
Estaba superemocionado: ¡iba a cumplir diez años! Mi cumpleaños, no obstante, no empezó muy bien, porque esa mañana, al abrir los ojos, vi que tenía esto planta-do en la nariz.


2
¡Las arañas son mi peor pesadilla! Le di un manotazo y me apresuré a saltar de la cama antes de que pudiera picarme, pero el pie se me quedó enredado en la manta. ¡Iba a tener una CAÍDA ÉPICA!
Eso de caerme es algo que suelo hacer a menudo. En realidad, lo hago muchísimo. Esa mañana, sin embargo, ocurrió otra cosa..., algo muy extraño.
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4
Justo antes de aterrizar de narices en el suelo, di un giro e hice dos volteretas alu-cinantes en el aire. Mis brazos esqueléti-cos se desplegaron y, como un par de mue-lles, me mandaron de vuelta al suelo, donde aterricé de pie ¡A LA PERFECCIÓN!
PERO
¡¿QUÉ...?!



5
Soy Nelson Kane, el Pringado Nelson Kane que vive en un vertedero en Duck Creek. Lo mío es tropezar, caerme, pero ¡no dar dobles volteretas en el aire!
Cada mañana, el espejo me recuerda exactamente quién soy.
¡SOY UN PRINgADO!
no estoy en forma
Mi pelo es una pena
Soy delgaducho
No molo
nada







6
Esa mañana, sin embargo, cuando me miré en el espejo, me di cuenta de algo muy extraño... Veía con toda claridad... ¡sin las gafas!
Normalmente no veía ni torta sin ellas.
Pero ese día ¡lo vi todo borroso cuando me las puse!



7
Me las quité y... ¡perfecto!
¡¿Qué estaba pasando?!
—¡Nelson, a desayunar! —gritó mi madre, al pie de las escaleras.
Me froté los ojos. Quizás aún estaba so-ñando cuando había dado esa impresio-nante doble voltereta.
¿UMM?


8
Pero ¿cómo se explicaba que pudiera ver a la perfección?
—¡Feliz cumpleaños, Nelson! —chillaron mamá, la abuela Pat y el primo Kenny des-de la cocina.


9
Estaban los tres de pie junto a la mesa, donde había un pastel de chocolate ENORME.
Mamá me tendió un regalo envuelto en el mismo papel que siempre solía usar en Na-vidades.
Vivimos en un vertedero y, la verdad, no nos va muy bien, así que, para llegar a fin de mes, mamá tiene que trabajar muchas horas como mujer de la limpieza. Por eso trata de ahorrar tanto dinero como puede.


10
Retiré con cuidado el