INTRODUCCIÓN
¿Quién no ha tenido miedo alguna vez en su vida? Miedo a ser rechazado, a cometer errores, a que pasen cosas malas, al fracaso, al éxito, a no ser suficiente, a la soledad, al abandono, al sufrimiento, a perder a alguien a quien quieres mucho, a volverse loco, a tomar decisiones, a las enfermedades, a la muerte, a conducir, a aburrirse, a la incertidumbre, a salir de casa, miedo al miedo… Hay tantos que la lista es interminable.
El miedo es la emoción que surge cuando el cerebro procesa que estamos ante una amenaza real o imaginaria. Es la manera que tiene nuestra mente de avisarnos de que no estamos a salvo; la sensación de alerta que nos prepara para enfrentar o evitar la situación que lo provoca. Sin miedo iríamos por la vida sin consciencia real del peligro de las cosas. El miedo, por lo tanto, es algo más que una simple emoción: es una herramienta útil, funcional y adaptativa que nos protege y nos mantiene a salvo. Llega, cumple con su propósito y se va.
Se va.
Se supone que se va.
¿Qué pasa cuando no lo hace? ¿Qué pasa cuando se queda y echa raíces en nuestra mente, robándonos la tranquilidad y convirtiendo cada instante de nuestra vida en una batalla? Cuando el miedo deja de ser útil, se transforma en una cárcel y aparece la ansiedad, uno de sus mil rostros.
El miedo surge en múltiples ámbitos de la vida, se disfraza, se filtra en nuestros pensamientos, se camufla en nuestra mente y, en ocasiones, tal vez más de las que desearíamos, se instala en nuestro pecho. No entiende de edades, clases sociales, sexos ni profesiones. El miedo nos hace sentir vulnerables. Tener miedo nos da vergüenza. Sentimos que debemos ocultarlo, cuando, en realidad, compartirlo, muchas veces, nos hace sentir más ligeros. No importa cuántas veces lo hayas enfrentado, ni cuán seguro de ti mismo creas estar, cuando aparece y se instala, arrasa. Te sientes la cosa más pequeña del planeta y lo peor de todo es que sabes que, aunque lo rechaces, aunque intentes evitarlo y apartarlo de tu vida, siempre está ahí, esperando el momento.
Cuando echo la vista atrás y recuerdo los momentos más desagradables de mi vida, me doy cuenta de que el miedo y la angustia también estaban ahí, conmigo. Algunos de esos momentos eran reales, sin embargo, otros no eran más que escenarios que solo ocurrían en mi mente. ¿Cuántas situaciones catastróficas has visualizado en tu mente y al final no han sucedido? Yo caía una y otra vez en las trampas del miedo sin darme cuenta de que me pasaba la mitad de la vida sufriendo por cosas que nunca iban a pasar.
La mitad de la vida.
Se dice pronto, pero se sufre lento.
Sabes de qué hablo, ¿verdad? De repente tu vida es como esa pesadilla en la que corres con todas tus fuerzas y nunca consigues moverte del sitio, o esa en la que tienes que marcar un número de teléfono para pedir ayuda, pero tus dedos parecen gelatina y nunca puedes contactar con nadie.
Te sientes la persona más vulnerable del mundo, llena de dudas e incertidumbres.
Caes en un pozo del que es muy difícil salir porque, cada vez que lo intentas, esos malditos pensamientos catastróficos y autodestructivos te atrapan y te hunden más y más.
Qué difícil es abordar todo eso cuando estás dentro de esa vorágine. Qué difícil es salir de ese bucle de anticipación, temor, autoexigencia y culpa. Qué difícil es luchar contra esos pensamientos intrusivos que te acorralan una y otra vez. Qué difícil es ser tu peor enemigo y que tu cabeza no ponga de su parte. Qué difícil es darte cuenta de que estás atrapado, querer salir y no poder.
Asociamos mucho el miedo a las fobias o a algún trauma o problema infantil, y en cambio es el origen de la gran mayoría de nuestros males.
Ruido mental, preocupaciones, rumiaciones, necesidad de controlarlo todo, pensamientos automáticos, obsesiones, culpa, problemas físicos que parecen no tener una causa clara o dificultades para conectar con los demás. Todos parecen problemas diferentes, pero todos tienen una causa común: el miedo. Cuando algo nos remueve, el miedo nos acompaña. ¡Y menudo compañero de viaje!
En este libro no encontrarás nada que tenga que ver con hacer desaparecer el miedo, algo que todos hemos deseado conseguir en algún momento. Aquí aprenderás a trazar una línea entre lo funcional y el sufrimiento. Comprenderás cómo funciona el miedo, por qué se instala en ti, de dónde vienen muchos de tus miedos y qué puedes hacer para manejarlos; y lo más importante: cómo puedes cultivar la seguridad dentro de ti para que, pase lo que pase, el miedo no te haga sentir desbordado. Descubrirás una recopilación de recursos para trabajar esta emoción y sus múltiples formas, pero también iniciarás la búsqueda de la seguridad en las relaciones contigo mismo y los demás. Porque calmar el miedo está bien, pero entenderlo, saber qué te enseña y sentir que, pase lo que pase, siempre tendrás una tabla de madera en la que flotar en medio del océano es aún mejor.
Quiero que emprendas un viaje hasta lo más profundo de ti mismo, donde comprobarás que el miedo, aunque incomoda, tiene mucho que decirte. ¿Qué pasaría si, en lugar de huir, te detuvieras a observarlo de cerca? ¿Qué pasaría si pudieras mirarlo a los ojos y entenderlo? ¿O si pudieras escuchar lo que intenta decirte cada vez que asoma? ¿Y si lo aceptaras de manera radical? Dejarías de ver el miedo como tu enemigo y se podría convertir en una oportunidad: de conocerte, de mejorar, de vivir con seguridad.
Estás a punto de empezar un recorrido hacia lo desconocido, una excursión por el laberinto que todos llevamos dentro.
¿Te has preguntado en alguna ocasión cuándo fue la primera vez que sentiste miedo? ¿Qué hiciste con él? ¿Lo ignoraste? ¿Lo enfrentaste? ¿O te dejaste atrapar? A lo largo de estas páginas, te zambullirás de lleno en la introspección y navegarás por tus recuerdos, para que esto no sea solo un paseo, sino un proceso transformador de verdad.
En cada capítulo, exploraremos distintas facetas del miedo. Veremos cómo se manifiesta y cómo cambia según las cosas que nos van pasando. Aprenderemos a reconocer sus señales, a identificar sus trampas, a estudiar sus orígenes, a salir de los bucles, a desgranar sus mecanismos y a hackearlo (esto suena bien, ¿verdad?).
Te hablaré, desde la ciencia y el cariño de mi experiencia, de:
• Cómo procesamos la información.
• Cómo funcionan el cuerpo y la mente cuando sentimos miedo.
• El miedo irracional.
• El origen del miedo.
• El miedo a que te pasen cosas buenas por el miedo a perderlas.
• La incapacidad de disfrutar de las cosas buenas que te pasan.
• Por qué, aunque sepas que un peligro no es real, igualmente sientes miedo.
• Por qué solo te fijas en lo malo.
• Cómo focalizar la mente para que no sientas que ella va más rápido que tú.
• El miedo a ser improductivo.
• El miedo a cometer errores.
• El miedo a aburrirte.
• La culpa.
• Sueños y pesadillas que se repiten.
• Higiene del sueño.
• Las trampas de la mente (sesgos y distorsiones cognitivas).
• Pensamientos automáticos.
• Pensamientos intrusivos.
• El secuestro amigdalar.
• Preocupaciones.
• Rumiaciones.
• Cómo salir del bucle mental.
• La necesidad de control.
• El humor como estrategia.
• La aceptación radical del miedo.
• El miedo y la seguridad en las relaciones con uno mismo y con los demás.
• El miedo al abandono.
• El miedo a no ser suficiente.
• El miedo a que nos hagan daño.
• El miedo a la soledad.
• El miedo al miedo.
• La relación que existe entre el miedo y la ira.
• Cómo manejar el miedo y la ira en nuestros conflictos con los demás.
• Cómo acompañar a las personas que nos rodean en la gestión del miedo y la ira.
He volcado en estas páginas años y años de trabajo e investigación, así que te acompañaré con todo lo que sé y todo lo que soy.
No es un camino fácil, pero sí es uno necesario.
¿Estás listo?
Tras leer este libro, no volverás a ver el miedo de la misma manera.