Terapia de runas

Eleonora Merighi

Fragmento

Terapia de Runas

Las runas

Cuenta la leyenda que las runas fueron descubiertas por el dios nórdico Odín, quien se colgó de un árbol llamado Yggdrasil y atravesó su cuerpo con una lanza durante nueve días, para aprender este arte y su poder de adivinación. De esta manera, se convirtió en el primer “sabio de las runas”.

El alfabeto rúnico que verás en este libro, y que a continuación voy a explicarte, se denomina Futhark. Es un grupo de símbolos que se asocian a letras y se empleó como un lenguaje en las sociedades nórdicas. Son 25 letras y símbolos que podemos encontrar en tallados, pinturas y combinaciones.

En la antigüedad, estos símbolos también se tallaban en huesos o madera para lecturas adivinatorias y como medio de comunicación. Luego, comenzaron a grabarse en piedras y desde entonces se los utiliza como un oráculo. Las inscripciones más antiguas que se encontraron datan del año 150 d. C. En el año 400 se agregaron ocho runas y a este nuevo alfabeto se lo denominó Futhorc. En este libro solo voy a tratar las 25 runas originales, ya que considero que son las más elementales para empezar a conocer este maravilloso lenguaje.

En la actualidad podés encontrar las runas en forma de talismanes, como decoración o en calendarios. Aunque desde hace unos años, y debido a distintas series televisivas, hay personas que eligen las runas para tatuarse a modo de protección o como lectura para prevención y predicción.

Y después... estamos los vitkis, que somos los lectores de runas. Algunas personas nos consideran hechiceros o brujos, pero prefiero pensar que somos traductores de este lenguaje. Aunque en tiempos de los vikingos éramos considerados entidades con poderes de videncia y sanación.

Los más fanáticos o los que no saben nada acerca de las runas van a encontrarlas en todas las combinaciones y de forma histórica en la serie Vikings. Y ahí podrán conocer también a la figura del seer, lector de runas. Por suerte me considero más linda que ese vitki.

Mi deseo es que puedas acercarte a otro medio de comunicación que abre caminos y nos indica dónde tenemos problemas y cómo podemos resolverlos. Pero siempre debés entender que son una guía, y después podrás hacer, o deshacer, lo que quieras con tu vida.

Las runas para mí son una herramienta para ordenar las cosas que veo de los otros. Nací bruja, sintiendo a la gente desde otro lugar. Ellas me permiten terminar de ver los caminos de la persona que viene a mi consulta.

La palabra runa deriva de un antiguo vocablo germano que significa “susurrar” o “secreto”. Mi intención es que ellas te susurren, pero que también te permitas escucharlas y escucharte.

Cada runa tiene una inscripción o símbolo que representa una letra y posee un elemento: Fuego, Tierra, Aire, Agua y Hielo.

• Runas de Fuego: serán las que te van a activar, ayudar a reaccionar y salir de tu zona de confort.

• Runas de Tierra: te van a permitir concretar tus proyectos.

• Runas de Aire: serán las encargadas de tu comunicación y tus vínculos.

• Runas de Agua: te van a ayudar a sentir y conectar con tu sexto sentido.

• Runas de Hielo: te mostrarán los problemas o inconvenientes que hay o que pueden venir.

Lectura de runas

La lectura de runas te ayuda a detectar qué caminos tenés bloqueados (donde sentís que no podés avanzar), cuáles están abiertos, y a ver con claridad aquello que te marca el destino. Me gusta pensar en las runas como un GPS.

A veces, pueden advertirte sobre situaciones que vas a ir viviendo y darte tips de cómo prepararte frente a ellas. Si en la lectura aparecen Runas de Hielo, por lo general suelo dar un ritual o ejercicios para que el consultante trabaje el aspecto donde está bloqueado, pero en este libro ¡voy a dar ejercicios y rituales con velas para muchas runas!

Hay distintas lecturas de runas: lectura de una runa, lectura de 3 runas, lectura de 6 runas, lectura de tu situación actual (con 10 runas), lectura de vidas pasadas (con 9 runas), lectura con consejos para todo el año (con 13 runas).

Mi idea es que este libro sea dinámico, así que voy a enseñarte las tres lecturas más sencillas: lectura de una runa (también conocida como Consejo de Odín), lectura de 3 runas y lectura de 6 runas. Te voy a transmitir todo lo que aprendí sobre ellas y cómo poder interpretarlas de forma rápida.

Lectura de una runa: te dará un consejo que te permitirá saber cuál es la energía que tenés, pero siempre va a depender de vos cómo leas el símbolo, cómo actives aquello que debas activar y cómo te predispongas a escucharte.

Lectura de 3 runas: te va a permitir saber qué está pasando frente a una pregunta determinada.

Lectura de 6 runas: te dará una respuesta detallada a cualquier duda, pregunta o situación que atravieses.

Como vitki, mi función es que el consultante se vaya con respuestas y que pueda activar todos los aspectos donde se siente frenado.

Este libro va a enseñarte a interpretar las runas para que las uses como una guía diaria, para utilizarlas frente a preguntas cotidianas, o simplemente para entenderte mejor jugando con ellas.

Alfabeto rúnico Futhark

Con este alfabeto podemos escribir nombres, mensajes y comunicarnos como lo hacían los nórdicos en la antigüedad. Las primeras seis runas forman la palabra Futhark, de ahí proviene su nombre. Falta la runa Odín, que no tiene símbolo y es “blanca” (aunque también podés encontrarla simbolizada en piedras con un punto en el centro, según el set de runas que compres).

En el alfabeto rúnico, desde Feoh (F) hasta Win (W), encontramos el Primer Aettir: representa el mundo material y conecta las runas de los comienzos con los esfuerzos que deberemos realizar para salir adelante, cómo aprender a diferenciar las cosas buenas y malas de la vida para poder comunicarnos y fluir con los otros, encontrando el deseo y el fuego que nos permiten estar vivos, asociarnos a otras personas y poder desarrollar nuestra felicidad.

Desde Haegl (H) hasta Sigel (S) encontramos el Segundo Aettir: representa el mundo de los cinco elementos y conecta las Runas de Hielo con los inconvenientes, los bloqueos, los cortes, los sacrificios. Una vez que logremos superarlos, alcanzaremos el equilibrio y nos sentiremos protegidos. Encontraremos la fortuna, y el sol volverá a brillar.

Desde Tyr (T) hasta Othel (O) encontramos el Tercer Aettir: representa el mundo espiritual. El descubrimiento de nuestro fuego interno que nos ayudará a nutrirnos de manera correcta, ver adónde queremos ir y con quién, para poder fluir con nuestra intuición, descubriendo lo que nos hace diferentes y reconociendo desde dónde venimos, entendiendo que podemos nacer y renacer las veces que hagan falta.

Necesitamos de todas las runas para poder fluir: la

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