Cuando los hechos cambian

Tony Judt

Fragmento

cua-1.xhtml

adorno

ÍNDICE

Portadilla

Índice

Dedicatoria

Citas

Introducción: De buena fe, por Jennifer Homans

PRIMERA PARTE. 1989: NUESTRA ÉPOCA

1. Cuesta abajo hasta el final

2. Europa: la gran ilusión

3. Delitos y faltas

4. ¿Por qué fue útil la Guerra Fría?

5. Freedom y Freedonia

SEGUNDA PARTE. ISRAEL, EL HOLOCAUSTO Y LOS JUDÍOS

6. El camino a ninguna parte

7. Israel: la alternativa

8. Un lobby, no una conspiración

9. El «problema del mal» en la Europa de la postguerra

10. Ficciones sobre el terreno

11. Israel debe desmontar su mito étnico

12. Israel sin clichés

13. ¿Qué se debe hacer?

TERCERA PARTE. EL 11- S Y EL NUEVO ORDEN MUNDIAL

14. Sobre La peste

15. Su peor enemigo

16. Cómo vivimos ahora

17. El sentimiento antiestadounidense en el mundo

18. El nuevo orden mundial

19. ¿Está condenada la ONU?

20. ¿Qué hemos aprendido, si es que hemos aprendido algo?

CUARTA PARTE. CÓMO VIVIMOS AHORA

21. El esplendor del ferrocarril

22. ¡Que vuelva el ferrocarril!

23. La bola de demolición de la innovación

24. ¿Qué está muerto y qué pervive en la socialdemocracia?

25. Generaciones en la encrucijada

QUINTA PARTE. A LA LARGA TODOS ESTAMOS MUERTOS

26. François Furet (1927-1997)

27. Amos Elon (1926-2009)

28. Leszek Kołakowski (1927-2009)

Relación cronológica de los ensayos y reseñas publicados por Tony Judt

Notas

Notas explicativas y del traductor

Índice analítico

Sobre el autor

Créditos

cua-2.xhtml

 

 

 

 

Para Joe

cua-3.xhtml

 

 

 

 

Cuando los hechos cambian, cambio de opinión. ¿Usted qué hace, señor?

Cita generalmente atribuida a John Maynard Keynes

 

 

Serán otros los que harán la historia […] Solamente puedo decir que sobre esta tierra hay plagas y hay víctimas, y que, en la medida de lo posible, uno tiene que negarse a estar del lado de la plaga.

Albert Camus, La peste

cua-4.xhtml

adorno

INTRODUCCIÓN: DE BUENA FE

 

POR JENNIFER HOMANS

 

 

 

Para mí, la única manera posible de escribir esta introducción consiste en separar al hombre de las ideas. Sin eso, el retroceso hacia el hombre, al que amé y con el que estuve casada desde 1993 hasta su muerte en 2010, se impone sobre el avance hacia las ideas. Cuando lean estos ensayos espero que también ustedes se centren en las ideas, porque son buenas ideas y se escribieron de buena fe. «Buena fe» tal vez fuera la expresión favorita de Tony y un valor que tenía en la más alta consideración, y se aferró a él en todo lo que escribió. Para él eso significaba, creo yo, escribir de un modo libre de cálculos y maniobras, intelectuales o de otro tipo. Una exposición limpia, clara y honesta.

Este es un libro sobre nuestro tiempo. El arco es descendente: desde las alturas de la esperanza y de la posibilidad, con las revoluciones de 1989, a la confusión, la devastación y la pérdida del 11-S, la guerra de Irak, la creciente crisis de Oriente Próximo y —como ya lo vio Tony— el declive autodestructivo de la república estadounidense. A medida que cambiaban los hechos y se desenvolvían los acontecimientos, Tony se encontró yendo progresiva y lamentablemente contracorriente, luchando con toda su fuerza intelectual por hacer que la nave de las ideas, aunque fuera levemente, tomara un rumbo diferente. La historia finaliza de manera brusca con su prematura muerte.

Este libro, para mí, es también un libro muy personal, ya que «nuestro tiempo» fue también «mi tiempo» con Tony: los primeros trabajos coinciden en los primeros años de nuestro matrimonio y del nacimiento de nuestro hijo Daniel, y siguen a través de nuestro tiempo juntos en Viena, París, Nueva York, el nacimiento de Nicholas y el crecimiento de la familia. Nuestra vida juntos comenzó, no por casualidad, con la caída del comunismo en 1989: yo era una estudiante de postgrado en la Universidad de Nueva York, en la que Tony enseñaba. En el verano de 1991 estuve viajando por E

Suscríbete para continuar leyendo y recibir nuestras novedades editoriales

¡Ya estás apuntado/a! Gracias.X

Añadido a tu lista de deseos