«Carnero hace aflorar la belleza en los momentos más inesperados. Da igual si es imposible advertirla, él la crea donde no la hay. Es la esencia de la literatura.»
Juan Tallón
Si es cierto que las historias nos salvan, esta es la historia de alguien que se salvó contándola. Es el relato de una depresión, de un vacío repentino en la vida de un hombre que bajo la mirada del autor se convierte en un trasfondo luminoso para hablar de lo importante, de todo aquello que se siente y no se dice.
Este viaje al fondo de una enfermedad que aún se nombra en voz baja nos habla de un padre, de un hijo y de todos los que les rodean. Nos habla de un enamoramiento transatlántico, de una misteriosa mujer que calla su dolor, de madrugadas en Buenos Aires y días circulando por carreteras secundarias españolas, de un funeral desértico en Cádiz o de un vuelo alucinógeno desde la selva amazónica hasta los altos hornos de Vizcaya. Nos habla de la madre fallecida que nunca se ha ido y del padre que siempre está ahí, de lo frágil de la masculinidad, de sus trampas y sus máscaras.
Después de ama y con su segunda novela, Carnero se confirma como un autor capaz de construir un universo propio mezclando memoria y ficción, acercándonos a hombres que están solos en hospitales y en velatorios, en bares de carretera y en áticos de diseño; hombres que quieren pedir ayuda pero que no saben cómo.
La crítica ha dicho...
«Para eso se escribe, para honrar a los muertos y comprender a los vivos. Para entender, más allá de la superficie, qué cruje dentro de alguien y lo ahoga de infelicidad. Para eso también leemos. Y este libro, durísimo y preciso, con un humor negro y sin embargo luminoso, nos consuela y nos dice: Yo también siento eso que nadie dice.»
Miqui Otero
«Carnero hace aflorar la belleza en los momentos más inesperados. “En todo hay belleza” podría ser su lema. Da igual si es imposible advertirla. Él la crea donde no la hay. Es la esencia de la literatura.»
Juan Tallón
«La de Carnero es una voz confesional que leemos como una novela. Contiene todo el ingenio, la ternura, el humor, la emoción y el derrumbe que requiere la tragicomedia en que convierte la invitación hacia uno mismo. A través de varios viajes, trenza un apasionante relato de supervivientes en la búsqueda incesante de su lugar en el mundo.»
Marta Orriols
«Ampliando la personalísima poética que inició en ama, José Ignacio Carnero trae en Hombres que caminan solos un noble e imperdible relato sobre el ocaso de la masculinidad, que incluye una entrañable cartografía del amor y los afectos en la edad de Tinder, un gradiente de expresiones de la melancolía contemporánea y un sensacional juego literario en los pliegues entre la realidad y la ficción.»
Antonio J. Rodríguez
«La tristeza es un territorio fértil, llega a escribir el narrador de este libro. Pero tal vez solo para aquellos que, como Carnero, son capaces de convertir la experiencia del dolor en alta literatura. Esta formidable novela es una emocionante narración acerca de lo que nos queda y nos sostiene cuando todo lo que creíamos sólido se ha desvanecido en el aire.»
Miguel Ángel Hernández
«Cuánta belleza destila la literatura de José Ignacio Carnero. Con qué delicadeza hilvana esta historia tan poderosa que es Hombres que caminan solos.»
Laura Ferrero
«Entre ficción y memoria, el autor ha elegido: literatura. Este libro es el viaje de un hombre que escribe al fondo de la fragilidad de todos los hombres.»
Aroa Moreno Durán