El emperador Vespasiano: amo del mundo (escaso de dinero contante y sonante)
Sus hijos:
Tito: (un tesoro)
Domiciano: (un tormento)
Sus funcionarios:
Anacrites: «secretario» (jefe de los servicios secretos)
Momo: «capataz de esclavos» (espía)
M. Didio Falco: investigador (que no espía)
Integrantes de una conspiración recientemente abortada, caídos en desgracia:
G. Atio Pertinax: (muerto)
Nombre desconocido: cadáver en un almacén (más muerto que mi abuela)
A. Curcio Longino: alejado de Roma por motivos religiosos
A. Curcio Gordiano: ídem
L. Aufidio Crispo: fuera de Roma en un crucero
El personal:
Barnabas: liberto favorito de Pertinax
Milo: mayordomo de Gordiano, un tío fuertote
Renacuajo: socio de Milo, un retaco
Baso: contramaestre de Crispo
Amigos y parientes de Falco:
Madre de Falco: una fuerza a tener en cuenta
Galla (la engañada): una de las hermanas, casada con un barquero
Lario (un romántico): hijo de Galla y del barquero
Maya (la sensata): otra hermana, esposa de Famia
Famia (el veterinario): un tío con trastienda
Mico (el yesero) L.: ¡basta con que menciones mi nombre!
Petronio Longo: capitán de la guardia del Aventino y el mejor amigo de Falco; un buen hombre
Arria Silvia: esposa de Petro; una mujer eficaz
Petronila, Silvana y Tadia: sus hijas
Ollia: la niñera
Un pescador: el pretendiente de la niñera
Lenia: propietaria de la Lavandería del Águila
Julio Frontino: pretoriano que conoció al hermano de Falco y lo lamenta
Gémino: subastador que podría ser el padre de Falco y espera no serlo
Glauco: entrenador de Falco, un hombre sensato
D. Camilo Vero: senador con un problema
Julia Justa: su esposa
Helena Justina: el problema de los anteriores; ex esposa de Atio Pertinax (problema de ella) y antigua amiga de Falco (problema de él)
Nombre desconocido: el zopenco del portero
Personas encontradas durante el cumplimiento del deber:
Nombre desconocido: sacerdote del templo de Hércules Gaditano, en el Aventino
Tulia: camarera del Trastevere con grandes proyectos
Laeso: capitán honrado de Taranto
Ventrículo: fontanero de Pompeya (bastante honesto para su oficio)
Roscio: afable carcelero de Herculano
S. Emilio Rufo Clemente: magistrado de Herculano con un historial impresionante (y muy poco sentido común)
Emilia Fausta: su hermana, ex prometida a Aufidio Crispo
Caprenio Marcelo: ex cónsul anciano; padre adoptivo de Atio Pertinax (también carente de sensatez)
Bryon: domador de los purasangres de Pertinax en la villa de Marcelo
Otros seres encontrados:
Nombre desconocido: una cabra sagrada
Nerón (alias Mancha): un buey que disfruta de sus vacaciones
Ned: un burro que se llevó una gran sorpresa
Cerbero (alias Fido): un amistoso perro de campo
Los purasangres de Pertinax:
Ferox: un campeón
Pequeño Encanto: una paradoja
Un día cualquiera
ROMA
Finales de primavera, año 71 d.C.
Entrega tu corazón al oficio que has aprendido
y así hallarás sosiego...
MARCO AURELIO, Meditaciones
Cuando llegué al final del callejón los delgados vellos de mi nariz estaban empezando a temblar. Mayo tocaba a su fin y hacía una semana que el tiempo era cálido en Roma. La intensa luz del sol primaveral había azotado el techo del almacén, por lo que fermentaba una generosa cantidad de moho en su interior. Las especias orientales zumbarían mágicamente y el cadáver que habíamos ido a enterrar estaría animado por la descomposición y los gases humanos.
Conseguí reunir cuatro voluntarios entre los miembros de la guardia pretoriana, más un capitán llamado Julio Frontino, que había conocido a mi hermano. Frontino y yo quitamos las cadenas de la calleja posterior y deambulamos por la zona de carga mientras los guardias intentaban abrir la pesada puerta interior.
Mientras esperábamos, Frontino mascull