A muy corta edad, Ana Isabel García Llorente demostró un acercamiento inusual al arte, lo que eventualmente la llevó a convertirse en Gata Cattana: poetisa, rapera y feminista. Su conocimiento de la tradición literaria española le hizo adquirir una perspectiva única que, tras su muerte, aún persiste en canciones y poemas sobre feminismo, justicia y libertad.