La luz tras las sombras: Kamala Harris ante el reto de cambiar la historia
El 5 de noviembre de 2024 se celebran las elecciones presidenciales en Estados Unidos. El candidato republicano, el ex presidente Donald Trump, y la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, se enfrentan por gobernar un país que busca seguir siendo el líder del mundo occidental. A escasos días de los comicios, la periodista María Ramírez, autora de «Kamala Harris. La primera» (Debate), dialoga en LENGUA con su editor Miguel Aguilar para ofrecer contexto sobre las opciones de una política poco convencional, una mujer dispuesta a cambiar la historia: Kamala Harris fue la primera mujer en ocupar el cargo de fiscal general del distrito de San Francisco, la primera mujer en ocupar el cargo de fiscal general del estado de California, la primera senadora negra en representar California en la Cámara Alta y la primera mujer vicepresidenta de Estados Unidos. Ahora, tras cuatro años en La Casa Blanca a la sombra de Joe Biden, Kamala puede convertirse en la primera presidenta de los EE UU.
Por Miguel Aguilar
Atlanta, Georgia, EE UU. 19 de octubre de 2024. La candidata presidencial demócrata, la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris, saluda a la multitud antes de hablar en un mitin de campaña para alentar el voto anticipado. Crédito: Getty Images.
Miguel Aguilar: ¿Cómo de excepcional es Kamala Harris en la escena política estadounidense?
María Ramírez: Harris es una política que no ha salido de Washington ni ha hecho el recorrido clásico en el partido porque la mayor parte de su carrera fue fiscal (si bien este es un cargo elegido en las urnas). Desde el punto de vista personal, como hija de inmigrantes criada en una comunidad multicultural, es parte de una generación que refleja el país actual mejor que otros representantes anteriores. Ha sido pionera a menudo en los puestos que ha ocupado por ser la primera mujer y la primera persona negra en llegar tan lejos.
Miguel Aguilar: ¿Qué pesa más contra sus opciones el 5 de noviembre: ser mujer, su origen étnico o la percepción de la situación económica?
María Ramírez: El contexto del país es difícil para alguien que ocupa una posición de Gobierno por la intensa división del país, la desconfianza en todas las instituciones y la percepción de que la economía va mal (aunque en realidad la de EEUU vaya ahora bien en términos de crecimiento, creación de empleo y subida de precios) y de que la inmigración es una amenaza. La misoginia y el racismo siguen jugando un papel para una minoría de la población, pero es difícil calibrar su efecto a priori porque los prejuicios no suelen ser tan explícitos en las encuestas. Algunas señales como la percepción de que Trump es más fuerte sí indican que hay cierta resistencia todavía a una mujer líder.
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Filadelfia, Pensilvania, 10 de septiembre de 2024. Donald Trump y Kamala Harris debaten por primera vez durante la campaña electoral presidencial en el National Constitution Center. Después de obtener la nominación del Partido Demócrata tras la decisión del presidente Joe Biden de abandonar la carrera, Harris se enfrentó a Trump en el primer cara a cara en la carrera por la Casa Blanca de 2024. Crédito: Getty Images.
Miguel Aguilar: ¿Por qué su papel como vicepresidenta ha sido tan poco lucido?
María Ramírez: Los vicepresidentes tienen un papel muy limitado ya que su única función clara es estar en la reserva por si le pasa algo al presidente. Siempre ha sido así. Harris cometió algunos errores, como dar pocas entrevistas, y también la perjudicaron algunas críticas del entorno de Biden y una campaña de ataques previos racistas y machistas de la extrema derecha por si acaso si presentaba.
Miguel Aguilar: ¿Cómo cambiaría una presidencia de Harris de la de Biden?
María Ramírez: En términos políticos sería continuista en el sentido de seguir invirtiendo dinero público en infraestructuras y programas de salud y mantener las alianzas con los aliados europeos, incluida la presencia de EEUU en la OTAN y el apoyo a Ucrania. Harris sería más contundente en intentar proteger los derechos reproductivos (si bien hay límites a lo que puede hacer por el bloqueo republicano en el Congreso) y en aumentar la presión al Gobierno de Netanyahu. Su equipo tendría caras nuevas y ya ha dicho que quiere incluir a una persona del Partido Republicano. Puede estar limitada por una mayoría republicana en el Senado que rompa con la norma y rechace sus nombramientos.
Miguel Aguilar: ¿Cómo se rehará el Partido Demócrata si pierde Harris?
María Ramírez: Los partidos en Estados Unidos no son organizaciones tan estructuradas como en Europa. Lo que los marca son los políticos en su cúspide. El Partido Demócrata en todo caso no ha cambiado tanto como el Partido Republicano y tiene muchas figuras jóvenes con potencial para competir, como la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, y otros en el banquillo. Pero, si Harris pierde, el principal reto para el Partido Demócrata y otras instituciones será cómo funcionar en un sistema que Trump quiere convertir en autoritario.
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