El mensaje de este libro es transversal para todas las edades, presenta una problemática que los adultos entendemos a la perfección, en muchas ocasiones de manera distinta a los niños, de una manera más dura que raya en el blanco y negro, pero que el autor trata de plasmas desde el amor de un hijo por su padre, desde la inocencia y la falta de prejuicios que muchas veces nublan a la sociedad. El libro nos presenta la historia de Frank, un pequeño niño que vive con su padre Gilbert y su madre Rita, en un pequeño pueblo de Reino unido. Los primeros capítulos nos introducen a la vida de Frank y Gilbert, a partir de la presentación de este ultimo, quien es el héroe de su hijo. A partir de una serie de hechos y desgracias, Gilbert queda sin trabajo y se desespera por poder sacar a su hijo adelante, llevándolo a mezclarse con gente que no es buena y así terminando por caer en la cárcel -como bien plantea la sinopsis-, dejando a su pequeño hijo al cuidado de su tía abuela Flip (amante de la poesía y personalmente un personaje que amé por su gran corazón).El libro relata este camino de Gilbert a partir de los ojos de su pequeño hijo de once años y como él ve a su amado padre. El autor acierta con describir a la sociedad como fría, distante, donde Gilbert, un hombre bueno, que debido a su accidente siempre quedaba como ultima elección para ser elegido en un trabajo, que por dos años no pudo encontrar ninguna fuente laboral, se tuvo que endeudar para poder alimentar a su hijo, lo que debido a situaciones que el libro plantea, termina delinquiendo. También, aborda de manera sutil en algunos capítulos como la sociedad te idolatra cuando estas en la cima y no es capaz de ayudarte cuando estas en el suelo. El libro se caracteriza por tener personajes muy variopintos, divertidos y cada uno más peculiar que el anterior. La historia es hermosa, su mayor fuerte es el incondicional amor entre un padre y su hijo, que es capaz de romper cualquier barrera, y lo que más me gustó, es la inocencia y a la vez madurez de Frank, que a pesar de saber que su padre había delinquido, el lo amaba demasiado, para él su padre era su héroe y el mejor padre del mundo, motivo por el cual es capaz de hacer cualquier cosa por rescatarlo de la cárcel y cobrar la injusticia que se cometió con él. Este libro lo puede leer un niño solo y entenderlo -jamás hay que subestimar la inteligencia de los niños-, pero si es un libro que quieres regalar a tu hijo, hermano pequeño, primo, quien quieras, siento de manera personal y como tía, que la lectura se enriquece demasiado si lo lees con él, ya que como he repetido a lo largo de esta reseña, el mensaje central de el libro es el amor de familia, sea como sea esta familia.
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