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ELISA VICTORIA. Sevilla, 1985. Ha colaborado en medios como Kiwi, La nueva carne, Tentaciones, El Salto, Telva, Verne, Tribus Ocultas, infoLibre, Cáñamo o Vice y en diversos fanzines y antologías. Autora de...
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ELISA VICTORIA. Sevilla, 1985. Ha colaborado en medios como Kiwi, La nueva carne, Tentaciones, El Salto, Telva, Verne, Tribus Ocultas, infoLibre, Cáñamo o Vice y en diversos fanzines y antologías. Autora de Porn & Pains, La sombra de los pinos, Vozdevieja y el recién publicado El Evangelio. El éxito de Vozdevieja ha convertido a Elisa Victoria en una voz fresca y original ampliamente reconocida en el panorama literario actual. El quicio, con ilustraciones de Mireia Pérez, es su primera novela ilustrada.

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La primera novela ilustrada de Elisa Victoria, autora de Vozdevieja y El evangelio.

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La primera novela ilustrada de Elisa Victoria, autora de Vozdevieja y El evangelio.

«A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que es una fiesta de espontaneidad y frescura, y co...

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«A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que es una fiesta de espontaneidad y frescura, y con ello pone en riesgo mi integridad. En el fondo la comprendo, las estrictas normas que hay que seguir a mi edad para mantenerse a flote le parecen ridículas. Es verdad que lo son.»

Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio.

A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde.

Hoy la pandilla le ha dejado caer que dé una vuelta con ellos. A lo mejor todo vuelve a ser normal. Quiere ir, pero no sabe qué ponerse, ni cómo hacer que no le suden las axilas, ni cómo disimular que es la tarde que más vértigo le da de su vida.

La primera novela ilustrada de Elisa Victoria describe con sencillez cada una de las dudas que conforman la preadolescencia. Un retrato bellísimo del crecimiento, la incomprensión y los momentos decisivos.

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Colección
Bruguera Contemporánea
Páginas
160
Target de edad
Adultos
Tipo de encuadernación
Tapa dura
Idioma
ES
Fecha de publicación
15-02-2024
Autor
Elisa Victoria
Editorial
BRUGUERA
Dimensiones
175mm x 250mm
Colección
Bruguera Contemporánea
Páginas
160
Target de edad
Adultos
Tipo de encuadernación
Tapa dura
Idioma
ES
Fecha de publicación
2024-02-15
Autor
Elisa Victoria
Editorial
BRUGUERA
Dimensiones
175mm x 250mm
9788402423986
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ELISA VICTORIA. Sevilla, 1985. Ha colaborado en medios como Kiwi, La nueva carne, Tentaciones, El Salto, Telva, Verne, Tribus Ocultas, infoLibre, Cáñamo o Vice y en diversos fanzines y antologías. Autora de...
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ELISA VICTORIA. Sevilla, 1985. Ha colaborado en medios como Kiwi, La nueva carne, Tentaciones, El Salto, Telva, Verne, Tribus Ocultas, infoLibre, Cáñamo o Vice y en diversos fanzines y antologías. Autora de Porn & Pains, La sombra de los pinos, Vozdevieja y el recién publicado El Evangelio. El éxito de Vozdevieja ha convertido a Elisa Victoria en una voz fresca y original ampliamente reconocida en el panorama literario actual. El quicio, con ilustraciones de Mireia Pérez, es su primera novela ilustrada.

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26 Reseñas
El quicio un libro increíble sobre la adolescencia
Cuando cumples 13 años todo tipo de decisiones se pueden volver difícil. Salir de clase e ir a mi casa. Quedo con mis amigos y no me vienen a buscar. Me quedo pensando toda la tarde en la adolescencia y sus efectos que provocan en los que me rodean. Empezar a beber, fumar, salir de fiesta, etc. Hablar con mi madre y ver que todo lo ve con un áng... Leer más
Cuando cumples 13 años todo tipo de decisiones se pueden volver difícil. Salir de clase e ir a mi casa. Quedo con mis amigos y no me vienen a buscar. Me quedo pensando toda la tarde en la adolescencia y sus efectos que provocan en los que me rodean. Empezar a beber, fumar, salir de fiesta, etc. Hablar con mi madre y ver que todo lo ve con un ángulo completamente diferente. Y una vecina adolescente. Un sinfín de normas que hay que seguir si quieres sobrevivir en esta etapa de la vida.Aventuras y más aventuras encontrarás si no dejas de leer este libro sin parar. Un libro para jóvenes que están entrando en la adolescencia, con el que se aprenderá sobre ella desde un punto de vista diferente.Con este libro nadie te sacará de quicio, sino que tú les sacarás del quicio a ellos.El quicio de Elisa Victoria es muy fácil de leer y en él podemos encontrar dibujos abstractos naranja fosforito y azul chillón.Es sin duda un gran libro para regalarlo a un amigo o familiar que sea joven para que se de cuenta de lo que es la adolescencia y sacar de quicio a quienes le rodean ?jajajajaja. Leer menos
Realista
Es el primer libro de la autora que leo, es decir, de Elisa Victoria. No la conocía ni sabía a qué tipo de escritura se dedicaba. De todas maneras, leyendo un poco de lo que trataba el libro, decidí darle la oportunidad y me animé a leerlo. No es el tipo de lectura que suelo leer. Suelo leer novelas románticas o de misterio divididas en capítulo... Leer más
Es el primer libro de la autora que leo, es decir, de Elisa Victoria. No la conocía ni sabía a qué tipo de escritura se dedicaba. De todas maneras, leyendo un poco de lo que trataba el libro, decidí darle la oportunidad y me animé a leerlo. No es el tipo de lectura que suelo leer. Suelo leer novelas románticas o de misterio divididas en capítulos. Es por eso que me ha costado bastante acabar con el libro. Aunque eso no quiere decir que el libro sea malo. El libro está bien y para las personas interesadas en estos tipos de libros seguro que es una joya. Comenta la historia de una niña que espera impaciente a que un grupo de 'amigos' vengan a buscarla a casa para salir. A partir de ahí, se explica todo lo que siente la niña en todo momento con respecto a la situación y a cómo se desarrolla. La verdad es que es una historia muy realista y que le pasa a muchos niños que están en esa edad. El libro en sí, es decir, el diseño y los dibujos son una maravilla. En eso pongo un total 10.  Leer menos
Interesante
Es un libro fino ilustrado, el primero de esta autora y nos cuenta como es la preadolescencia desde el punto de vista de una, todad las dudas e inseguridades y todo lo que se le pasa por la cabeza.Es una edición muy bonita y la forma de narrar me ha parecido muy íntima y especial pero sencilla. Nos cuenta la historia desde una adolescente de 13 ... Leer más
Es un libro fino ilustrado, el primero de esta autora y nos cuenta como es la preadolescencia desde el punto de vista de una, todad las dudas e inseguridades y todo lo que se le pasa por la cabeza.Es una edición muy bonita y la forma de narrar me ha parecido muy íntima y especial pero sencilla. Nos cuenta la historia desde una adolescente de 13 años, que siente que toda su vida es complicada.Mireia Pérez es la artista que hace las ilustraciones tan bonitas que acompaña el texto. Me parece interesante para padres que sientan lo que siente un adolescente y para los niños de 12 13 años para que sintieran que no están solos y que hay mucha gente como ellos.Lo recomendaría incluso en los colegios la verdad para ayudar a los preadolescentes que existen muchas inseguridades y problemas a esa edad pero que se puede solucionar.Desde luego con ganas de leer más de la autora pero sobre todo de ver ilustraciones de esa ilustradora. Es muy recomendable si te gustan los libros íntimos y especiales donde reflexionar y pensar. Leer menos
Interesante
Es un libro fino ilustrado, el primero de esta autora y nos cuenta como es la preadolescencia desde el punto de vista de una, todad las dudas e inseguridades y todo lo que se le pasa por la cabeza.Es una edición muy bonita y la forma de narrar me ha parecido muy íntima y especial pero sencilla. Nos cuenta la historia desde una adolescente de 13 ... Leer más
Es un libro fino ilustrado, el primero de esta autora y nos cuenta como es la preadolescencia desde el punto de vista de una, todad las dudas e inseguridades y todo lo que se le pasa por la cabeza.Es una edición muy bonita y la forma de narrar me ha parecido muy íntima y especial pero sencilla. Nos cuenta la historia desde una adolescente de 13 años, que siente que toda su vida es complicada.Mireia Pérez es la artista que hace las ilustraciones tan bonitas que acompaña el texto. Me parece interesante para padres que sientan lo que siente un adolescente y para los niños de 12 13 años para que sintieran que no están solos y que hay mucha gente como ellos.Lo recomendaría incluso en los colegios la verdad para ayudar a los preadolescentes que existen muchas inseguridades y problemas a esa edad pero que se puede solucionar.Desde luego con ganas de leer más de la autora pero sobre todo de ver ilustraciones de esa ilustradora. Es muy recomendable si te gustan los libros íntimos y especiales donde reflexionar y pensar. Leer menos
Necesario y diferente.
Para comenzar diré que ha sido la primera vez que leía a la autora y ha sido una gran sorpresa. Su estilo, su forma de contar las cosas y la estética es diferente y cautivadora. Este libro, como todos los demás, tiene una estética que llama la atención. Los colores vivos y las ilustraciones tan distintas que contiene lo hacen especial.El libro e... Leer más
Para comenzar diré que ha sido la primera vez que leía a la autora y ha sido una gran sorpresa. Su estilo, su forma de contar las cosas y la estética es diferente y cautivadora. Este libro, como todos los demás, tiene una estética que llama la atención. Los colores vivos y las ilustraciones tan distintas que contiene lo hacen especial.El libro es perfecto si te encuentras en un bloqueo, sobre todo bajo mi punto de vista el libro esta destinado para jóvenes que empiezan la etapa de la adolescencia. Es bastante dinámico y ese es un gran punto a favor. Una fantasía que únicamente me ha dado muchísimas ganas de continuar leyendo los futuros y también anteriores trabajos de la autora. Una joya.El quicio es un libro que habla de la pubertad. Ese época tan complicada donde las cosas cambian muy rápido.Nos destaca sobre todo los problemas adolescentes, lo difícil que es encajar los cambios,  la incomprensión por parte de todos, el tener que dejar cosas atrás y los momentos decisivos que iremos encontrando. Por todo ello el libro es ideal para comprender un poco más y sentirse arropado en esta época tan complicada y bella. Leer menos
Recomendable
El libro nos habla de una chica que esta en su plena pubertad y empieza a experimentar esos cambios en los que te sale el bello en sitios donde no tenias, o te salen granos que te incomodan.... También a nivel psicológico en el que tu mente ya no es tan inocente, nadie te trata como un niño y tu circulo social se vuelve muy importante.No conocía... Leer más
El libro nos habla de una chica que esta en su plena pubertad y empieza a experimentar esos cambios en los que te sale el bello en sitios donde no tenias, o te salen granos que te incomodan.... También a nivel psicológico en el que tu mente ya no es tan inocente, nadie te trata como un niño y tu circulo social se vuelve muy importante.No conocía a la autora y ha sido un descubrimiento maravilloso, tiene una manera de narrar muy especial te transporta a mil sitios y situaciones solo con sus palabras, te pones en la piel de la protagonista y todo lo que le pasa, recordando cómo fueron esos años.Se relata el punto de inflexión donde se pasan de los juegos infantiles a las cosas de mayores, donde los amigos han pasado de ser niños a hacer cosas de adultos.Me lo he leído en una tarde y me ha encantado, sin duda se lo dejare a los pequeños de mi casa para que lo disfruten, aprendan y vean. En definitiva ha sido una muy buena lectura, además acompañada de ilustraciones. Leer menos
Peculiar
Como todos los demás libros, este libro tiene una estética que atrae la atención de la gente. Los colores vivos y las ilustraciones muy diferentes la hacen única.Cuando leí la sinopsis, supe que sería una historia con la que me identificaría, porque me llevaría hasta los 13 años, cuando terminó la Primaria, y llegó el momento de empezar de nuevo... Leer más
Como todos los demás libros, este libro tiene una estética que atrae la atención de la gente. Los colores vivos y las ilustraciones muy diferentes la hacen única.Cuando leí la sinopsis, supe que sería una historia con la que me identificaría, porque me llevaría hasta los 13 años, cuando terminó la Primaria, y llegó el momento de empezar de nuevo con amigos a los que les gustaba y no les gustaba. viejo.Es una copia fiel de la etapa más importante pero quizás menos comprendida de todas nuestras vidas: la adolescencia.La narrativa es sencilla, y es una buena opción para adolescentes y adultos en esta situación, porque refleja perfectamente la realidad. Como libro ilustrado, la lectura se vuelve más interesante y hace que la imaginación sea más emocionante.Este será el regalo perfecto para una próxima cita. Siempre pensaré que proporcionar lectura es renunciar al conocimiento, los sueños y la imaginación. Es perfecto para leer si te encuentras en un bloqueo, especialmente recomendado para aquellos que recién estén entrando en la adolescencia. Es genuino, a la par que dinámico. Una fantasía que únicamente me ha dado muchísimas ganas de continuar leyendo los futuros y también anteriores trabajos de la autora. Una joya. Leer menos
Una historia para reflexionar
Este es un libro que regalar a todos los chicos y chicas que estén pasando por un momento difícil a la entrada de la pubertad, cuando te crece pelo donde antes tenías siempre una piel lisa y suave, cuando te salen esos primeros horribles granos cuando antes tenías un cutis perfecto, cuando crecen partes de tu cuerpo de las que hasta ahora no era... Leer más
Este es un libro que regalar a todos los chicos y chicas que estén pasando por un momento difícil a la entrada de la pubertad, cuando te crece pelo donde antes tenías siempre una piel lisa y suave, cuando te salen esos primeros horribles granos cuando antes tenías un cutis perfecto, cuando crecen partes de tu cuerpo de las que hasta ahora no eras consciente. Pero sobre todo todos esos cambios a nivel psicológico, cuando te das cuenta que ya no eres, y la sociedad ya no te trata como un niño, pero tampoco como un adulto. Ese fastidioso limbo en el que los amigos, tu círculo social se vuelve súper importante, y sientes que debes encajar en un grupo porque si no no eres nadie ni nada, solo un paria al que hay que ignorar.La verdad es que es la segunda vez que leo a la autora, ya leí con anterioridad su otro libro, El Evangelio, y aunque ese también me gustó mucho, me quedo sin duda con todo lo que logra transmitir este libro tan bien hecho, y con una edición tan sumamente preciosa. Mi enhorabuena a la autora, desde luego que voy a seguir de cerca todos sus trabajos Leer menos
Interesante
A los 13 años, nada es fácil, y la simple acción de tocar el porterillo de casa entraña riegos, pues, tu madre puede responder contando chistes o poniendo voces, ya que ella no es una madre aburrida pero las estrictas normas que hay que seguir a esa edad, por ridículas que parezcan, hacen que esto, ponga en riesgo su integridad.Además el cambio ... Leer más
A los 13 años, nada es fácil, y la simple acción de tocar el porterillo de casa entraña riegos, pues, tu madre puede responder contando chistes o poniendo voces, ya que ella no es una madre aburrida pero las estrictas normas que hay que seguir a esa edad, por ridículas que parezcan, hacen que esto, ponga en riesgo su integridad.Además el cambio de colegio al instituto fue complicado, pues de repente, su antigua pandilla empezó a fumar, a comportarse mal y a hacer cosas raras y ella quedó desplazada pues no termina de encajar, pero, todo está apunto de cambiar porque esta tarde, sus antiguos amigos la han incluido por fin en un plan y han quedado para dar una vuelta, así que quizás, si logra encajar, todo puede volver a la normalidad y ser de nuevo aceptada entre ellos. Leí a Elisa Victoria por primera vez con El evangelio y me fascinó su forma de adentrarnos en la trama y la historia que nos contaba y cuando vi esta novela ilustrada no lo dudé. Ha sido una lectura muy interesante que nos retrata los problemas adolescentes, lo complicado que parece ser encajar cuando todo cambia y todo se vuelve raro, el esfuerzo que supone simplemente intentar actuar con naturalidad, la incomprensión por parte de todos, el tener que dejar cosas atrás y los momentos decisivos que iremos encontrando. En definitiva ha sido una muy buena lectura, además acompañada de ilustraciones.  Leer menos
Muy bonito
Texto de Elisa Victoria e ilustraciones de Mireia Pérez, cuyo nombre aparece en pequeñito pero cuyo trabajo es más que notable.El quicio es un libro que habla de la pubertad, no de la adolescencia. Ese inicio complicado, donde las cosas de repente son distintas, en una sola tarde.Un libro estupendo no solo para regalar a un chico o chica en esa ... Leer más
Texto de Elisa Victoria e ilustraciones de Mireia Pérez, cuyo nombre aparece en pequeñito pero cuyo trabajo es más que notable.El quicio es un libro que habla de la pubertad, no de la adolescencia. Ese inicio complicado, donde las cosas de repente son distintas, en una sola tarde.Un libro estupendo no solo para regalar a un chico o chica en esa edad tan complicada, en la que de repente se deja de ser niño, también me ha gustado para padres, no está mal recordar lo que les ocurre a nuestros hijos en esta época, como se sienten y eso ayuda a entenderles.Se relata es punto de inflexión donde se pasan de los juegos infantiles a las cosas de mayores, donde los amigos han pasado de ser niños a hacer cosas de adultos.Un buen regalo para estas navidades, yo ya tengo uno envuelto para regalo.Bonito título, preciosas  ilustraciones y un texto muy bien narrado.No conocía ni a la autora ni a la ilustradora, pero las tendré en cuenta a partir de ahora.  Leer menos
Descubrimiento
Para mi la primera toma de contacto con la autora y tengo que reconocer que escribe de una forma tan especial que es muy difícil no empatizar con la protagonista.La protagonista, de la cual nunca sabemos su nombre quizás por que podemos ser cualquiera de nosotros, nos cuenta mientras espera que lleguen a llamarla para que salga a dar una vuelta,... Leer más
Para mi la primera toma de contacto con la autora y tengo que reconocer que escribe de una forma tan especial que es muy difícil no empatizar con la protagonista.La protagonista, de la cual nunca sabemos su nombre quizás por que podemos ser cualquiera de nosotros, nos cuenta mientras espera que lleguen a llamarla para que salga a dar una vuelta, como a acabado la primaria, como llego al instituto y se dio cuenta de que había perdido a sus amigos y lo sola que se encuentra.A medida que vas leyendo descubres como ha ocurrido una gran tratada y que ella es la única que se siento mal por lo ocurrido y los demás la vieron como quien no maduró y se quedo en una zona más infantil mientras ella ve como cambien de actitud, de forma de vestir y hasta de comportase y ella no entiende nada.Es increíble como esperas con ella ha que suene el telefonillo y pueda bajar a dar un paseo, pero lo increíble son las reflexiones que hace y a las conclusiones que llega con tan solo 13 años.Realmente la educación ha cambiado, nosotros íbamos al instituto con 14 años ellos llegan con 11 o 12 años y al ser más pequeños creo que lo viven de una forma más dura, un libro para que todos lean y sientan como es la vida allí y como la viven los críos. Leer menos
Retrato crudo y tremendamente realista de situaciones vividas po
Es la primera obra que leo de Elisa Victoria y sinceramente, no podría haberme sorprendido para mejor. Se trata de un monólogo crudo, sincero y atrapante a cada párrafo, complementado con ilustraciones al dedillo que me ha maravillado de principio a fin.Está tan inteligentemente escrito, que probablemente aunque no llegues a identificarte con la... Leer más
Es la primera obra que leo de Elisa Victoria y sinceramente, no podría haberme sorprendido para mejor. Se trata de un monólogo crudo, sincero y atrapante a cada párrafo, complementado con ilustraciones al dedillo que me ha maravillado de principio a fin.Está tan inteligentemente escrito, que probablemente aunque no llegues a identificarte con la historia, vas a reflexionar a cerca de haber presenciado vivencias parecidas en tu entrono. Es claro y conciso, con reflexiones que mantendrás en tu cabeza una vez terminado.La protagonista tiene la completa capacidad de agarrarte el corazón y hacerte descubrir el sufrimiento en silencio de tantísimas personas. Es de las obras más completas y honestas, a la vez que francas que he tenido en mis manos.Es perfecto para leer si te encuentras en un bloqueo, especialmente recomendado para aquellos que recién estén entrando en la adolescencia. Es genuino, a la par que dinámico. Una fantasía que únicamente me ha dado muchísimas ganas de continuar leyendo los futuros y también anteriores trabajos de la autora. Una joya. Leer menos
regreso a la pubertad
El quicio es mi primera toma de contacto con la autora Elisa Victoria. Está editada por Bruguera en tapa dura con 160 páginas con un texto exquisito y unas ilistraciones muy peculiares. Esta novela ilustrada nos habla de la pubertad. Nuestra protagonista nos cuenta desde su punto de vista, esa etapa tan complicada en la vida de una persona. Esa ... Leer más
El quicio es mi primera toma de contacto con la autora Elisa Victoria. Está editada por Bruguera en tapa dura con 160 páginas con un texto exquisito y unas ilistraciones muy peculiares. Esta novela ilustrada nos habla de la pubertad. Nuestra protagonista nos cuenta desde su punto de vista, esa etapa tan complicada en la vida de una persona. Esa etapa en la que empezamos a adquirir nuestra identidad como personas, a ser conscientes de muchas cosas, la responsabilidad se nos estampa en la cara... Una etapa difícil y dura que todo ser humano debe pasar para convertirse en adulto y que desde la perspectiva del ya adulto, parece coser y cantar. La forma de narrar de la autora me ha gustado bastante, es fluida, muy sentida, emotiva y real. Sabe transmitir muy bien desde el punto de vista de nuestra adolescente y eso hace más sencillo empatizar con la historia. Las ilustraciones le dan un punto extra a la novela. Corren por cuenta de Mireia Pérez y, aunque no son el tipo de dibujos que me atraen más, debo admitir que tienen un trazo muy personal. Sin duda, una forma de volver a esa etapa en la que no encajábamos con nada y nadie, recordar aquellos sentimientos harán que miremos con perspectiva todo lo que hemos madurado desde esos años tan lejanos. Leer menos
Grandes ilustraciones
La primera novela ilustrada de Elisa Victoria, autora deVozdevieja yEl evangelio. «A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chis... Leer más
La primera novela ilustrada de Elisa Victoria, autora deVozdevieja yEl evangelio. «A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que es una fiesta de espontaneidad y frescura, y con ello pone en riesgo mi integridad. En el fondo la comprendo, las estrictas normas que hay que seguir a mi edad para mantenerse a flote le parecen ridículas. Es verdad que lo son.» Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio. A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde. Hoy la pandilla le ha dejado caer que dé una vuelta con ellos. A lo mejor todo vuelve a ser normal. Quiere ir, pero no sabe qué ponerse, ni cómo hacer que no le suden las axilas, ni cómo disimular que es la tarde que más vértigo le da de su vida. La primera novela ilustrada de Elisa Victoria describe con sencillez cada una de las dudas que conforman la preadolescencia. Un retrato bellísimo del crecimiento, la incomprensión y los momentos decisivos. Leer menos
Reflexión sobre la adolescencia
No es la primera vez que leo algo de Elisa Victoria, de hecho, mi primera lectura de ella fue “Vozdevieja” y ya me enganchó.Este libro, como todos los demás, tiene una estética que llama la atención. Los colores vivos y las ilustraciones tan distintas que contiene lo hacen especial.Cuando leí la sinopsis supe que sería una historia con la que me... Leer más
No es la primera vez que leo algo de Elisa Victoria, de hecho, mi primera lectura de ella fue “Vozdevieja” y ya me enganchó.Este libro, como todos los demás, tiene una estética que llama la atención. Los colores vivos y las ilustraciones tan distintas que contiene lo hacen especial.Cuando leí la sinopsis supe que sería una historia con la que me sentiría identificada, puesto que me transportaría a mis 13 años, cuando la Primaria acaba y toca empezar de nuevo con amigos que, guste o no, se hacen mayores.Es una copia muy real de la etapa más importante y, quizá menos comprendida, de la vida de todos nosotros: la pubertad.La narración es sencilla, y puede ser una muy buena opción tanto para adolescentes que se encuentran en esta situación, como para adultos ya que refleja a la perfección la realidad. Al ser un libro ilustrado, la lectura se hace más amena y deja volar más la imaginación.Sería un regalo perfecto para las fechas que se aproximan. Siempre pensaré que regalar lecturas es regalar conocimiento, sueños e imaginación. Leer menos
muy peculiar
Me encanta la autora. Me enamoró con Voz de vieja y El evangelio, y esta historia no ha sido menos.Tiene una manera de narrar muy especial te transporta a mil sitios y situaciones solo con sus palabras, te pones en la piel de la protagonista y todo lo que le pasa, recordando cómo fueron esos años.Además esta edición es una maravilla, ilustrada y... Leer más
Me encanta la autora. Me enamoró con Voz de vieja y El evangelio, y esta historia no ha sido menos.Tiene una manera de narrar muy especial te transporta a mil sitios y situaciones solo con sus palabras, te pones en la piel de la protagonista y todo lo que le pasa, recordando cómo fueron esos años.Además esta edición es una maravilla, ilustrada y con un montón de detalles.Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio.A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde.Hoy la pandilla le ha dejado caer que dé una vuelta con ellos. A lo mejor todo vuelve a ser normal. Quiere ir, pero no sabe qué ponerse, ni cómo hacer que no le suden las axilas, ni cómo disimular que es la tarde que más vértigo le da de su vida. Leer menos
bastante recomendable
El quicio ha sido mi primera toma de contacto con Elisa Victoria y su estreno con la novela ilustrada me ha sorprendido gratamente.El libro hace una radiografia profunda y lucida sobre la pubertad, una de las etapas más importantes y complicadas del ser humano y nos invita a hacer una reflexión sobre ella. El relato es sencillo y complejo y nos ... Leer más
El quicio ha sido mi primera toma de contacto con Elisa Victoria y su estreno con la novela ilustrada me ha sorprendido gratamente.El libro hace una radiografia profunda y lucida sobre la pubertad, una de las etapas más importantes y complicadas del ser humano y nos invita a hacer una reflexión sobre ella. El relato es sencillo y complejo y nos muestra cómo en el transcurso de una tarde es capaz de alterar el devenir de una vida entera.La escritora nos propone un viaje sobre lo cuotidiano y su conexión con los temas trascendentales y consigue reflejar la carga que tiene lo que es aparentemente trivial en una etapa de crecimiento tan importante como es la preadolecencia.Mireia Perez, por su parte, no deleita con unas maravillosas ilustraciones que acompañan los textos hacen la lectura más ligera y bonita haciéndote que te adentres más en la historia.El trabajo de esta ilustradora ilumina el texto y despliega un código repleto de sinestesia y simbología que mezclado con la rica prosa de la autora hace que ambos lenguajes confluyan y generen una estética fascinante, muy potente y detallista. Leer menos
No me defraudo
va de una chica que a los trece años casi todas las opciones son malas. Todo negativo, el botón que corresponde a du casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no e... Leer más
va de una chica que a los trece años casi todas las opciones son malas. Todo negativo, el botón que corresponde a du casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que es una fiesta de espontaneidad y frescura, y con ello pone en riesgo mi integridad. En el fondo la comprendo, las estrictas normas que hay que seguir a mi edad para mantenerse a flote le parecen ridículas. Es verdad que lo son.» Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio. A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde. Leer menos
Una historia peculiar.
Una peculiar historia.Revisado en España el 18 de noviembre de 2021Me encanta la autora. Me enamoró con Voz de vieja y El evangelio, y esta historia no ha sido menos.Tiene una manera de narrar muy especial te transporta a mil sitios y situaciones solo con sus palabras, te pones en la piel de la protagonista y todo lo que le pasa, recordando cómo... Leer más
Una peculiar historia.Revisado en España el 18 de noviembre de 2021Me encanta la autora. Me enamoró con Voz de vieja y El evangelio, y esta historia no ha sido menos.Tiene una manera de narrar muy especial te transporta a mil sitios y situaciones solo con sus palabras, te pones en la piel de la protagonista y todo lo que le pasa, recordando cómo fueron esos años.Además esta edición es una maravilla, ilustrada y con un montón de detalles.Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio.A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde.Hoy la pandilla le ha dejado caer que dé una vuelta con ellos. A lo mejor todo vuelve a ser normal. Quiere ir, pero no sabe qué ponerse, ni cómo hacer que no le suden las axilas, ni cómo disimular que es la tarde que más vértigo le da de su vida. Leer menos
Una novela que atrapa desde sus primeras páginas
La primera novela ilustrada de Elisa Victoria me ha encantado. Se trata de un libro innovador en cuanto a su escritura y edición. No tenía muchas esperanzas puestas en que esta novela me atrapara, y sin embargo lo ha conseguido hacer casi desde las primeras páginas. A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresp... Leer más
La primera novela ilustrada de Elisa Victoria me ha encantado. Se trata de un libro innovador en cuanto a su escritura y edición. No tenía muchas esperanzas puestas en que esta novela me atrapara, y sin embargo lo ha conseguido hacer casi desde las primeras páginas. A los trece años casi todas las opciones son malas. Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo, pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que es una fiesta de espontaneidad y frescura, y con ello pone en riesgo mi integridad. En el fondo la comprendo, las estrictas normas que hay que seguir a mi edad para mantenerse a flote le parecen ridículas. Es verdad que lo son.Tiene trece años. Un día acabó Primaria con la promesa de reencontrarse con su pandilla, pero a la vuelta del verano no volvió a saber de ellos. Ahora quedan, fuman, visten raro y se comportan aún peor. No ha llegado a tiempo al cambio.A veces, saca los muñecos, pero los esconde rápido debajo de la cama. También se mira al espejo, y se pregunta si alguien, algún día, querrá darle un beso. Y observa, siempre, incesantemente, mientras se apoya en el quicio de la ventana, que se le clava en la piel, a la vecina de enfrente, al otro lado de la calle, tan mayor y tan guapa y tan rebelde.Hoy la pandilla le ha dejado caer que dé una vuelta con ellos. A lo mejor todo vuelve a ser normal. Quiere ir, pero no sabe qué ponerse, ni cómo hacer que no le suden las axilas, ni cómo disimular que es la tarde que más vértigo le da de su vida. Leer menos
el quicio
cadáveres de homosexuales aparecen brutalmente asesinados en el Berlín Este de finales de la Guerra Fría. Las autoridades no le prestan la atención que merece hasta que un alto cargo de la Stasi que maneja información muy sensible para el Estado aparece muerto en las mismas circunstancias.Por su experiencia en el comportamiento de la mente crimi... Leer más
cadáveres de homosexuales aparecen brutalmente asesinados en el Berlín Este de finales de la Guerra Fría. Las autoridades no le prestan la atención que merece hasta que un alto cargo de la Stasi que maneja información muy sensible para el Estado aparece muerto en las mismas circunstancias.Por su experiencia en el comportamiento de la mente criminal, encargan la investigación a Viktor Lavrov, que, junto al inspector apartado de la Kriminalpolizei, Otto Bauer, buscará la manera de sumergirse en un mundo prohibido tras los pasos de un despiadado asesino mesiánico.César Pérez Gellida regresa para descolocarnos con un trepidante thriller negro magistralmente ambientado en una época no tan lejana pero sí muy distante en el ámbito de los derechos y las libertades. Otra nueva joya del que es para muchos el mejor escritor patrio de novela negra.Un libro con el que he conectado a la primera, una historia que si te gustan los thrillers, te le acabas en un abrir y cerrar de ojos. Su anterior libro, todo lo mejor, le termine también en poco tiempo y me gusto mucho. Ademas, le quería releer porque este verano estuve en Berlin y el tema de la guerra fría y su muro me encantan, y así lo podía vivir n poco mas.El autor, me parece muy buen escritor porque lo cuenta de manera que te ves inmerso en la historia. Un libro totalmente recomendable.V arios Leer menos
Un libro mágico para los peques
Edición en tapa dura preciosa, con preciosas ilustraciones. Una historia de Chispas, el personaje principal.. que entretendrá a los niños de la casa, y hará volar su imaginación, si cabe aún más.Merece la pena leerlo acompañándolo de sus dibujos.Este tipo de libros infantiles les motiva e incentiva a leer, y muy acertado para que los niños, se i... Leer más
Edición en tapa dura preciosa, con preciosas ilustraciones. Una historia de Chispas, el personaje principal.. que entretendrá a los niños de la casa, y hará volar su imaginación, si cabe aún más.Merece la pena leerlo acompañándolo de sus dibujos.Este tipo de libros infantiles les motiva e incentiva a leer, y muy acertado para que los niños, se inmersen en la lectura desde ya bien pequeñitos.La lectura de este libro y muchos otros para sus edades, les ayuda a leer mejor y coger velocidad, corregir faltas de ortografía e ir ampliando su pequeño vocabulario del cual aún disponen.Chispas, el protagonista de la historia, hará que los peques conecten con él, divaguen por esos mundos mágicos, y muchos de ellos cuando finalicen el libro querrán ser músicos y nos pedirán de cara a las Navidades y Reyes Magos, pues instrumentos musicales.Agradecida a Manuel Rivas este tipo de lectura, que la podemos hacer en familia, cuando ellos se encuentras perezosos, en este caso mis sobrinos. Leer menos
Best book
No me acostumbro a coger las llaves por la mañana. Hace ya tres años que tengo mi propio juego y le di mil vueltas al tema de qué llavero colocarle antes de elegir un candado que me pareció muy carismático. Al principio, por la novedad, me las llevaba a todas partes. Llegar a tu portal, sacarlas del pantalón enchufadas al candado gordo y brillan... Leer más
No me acostumbro a coger las llaves por la mañana. Hace ya tres años que tengo mi propio juego y le di mil vueltas al tema de qué llavero colocarle antes de elegir un candado que me pareció muy carismático. Al principio, por la novedad, me las llevaba a todas partes. Llegar a tu portal, sacarlas del pantalón enchufadas al candado gordo y brillante, escoger una e introducirla en la cerradura era todo un signo de prestigio y madurez, una declaración de independencia. Con aquel gesto le dejabas claro a la calle entera que podías entrar y salir cuando quisieras y a tus padres les parecía bien. Pero por algún motivo a aquello solo le vi sentido por las tardes y aún no he sido capaz de cambiarlo. Me convendría. Lo intenté y no me hizo gracia. Sentarse en clase con las llaves clavadas en el pantalón es incómodo. Dejarlas en la mochila me crispa los nervios porque en mi instituto hay montones de robos y no las quiero perder. Me acerco al porterillo. La calle sigue llena de tensión y el peligro está a punto de extinguirse pero no hay que confiarse, hasta el último momento queda lugar para un coletazo de miseria. A los trece años casi todas las opciones son malas.Aprieto el botón que corresponde a mi casa. Quisiera que mi madre me abriera la puerta sin decir nada porque sabe perfectamente que soy yo pero a ella le gusta contestar, le gusta incluso poner voces, hacer chistes, demostrarle al barrio desde la cocina que ella no es una madre aburrida, que ella es una fiesta de espontaneidad y frescura, y con ello pone en riesgo mi integridad. En el fondo la comprendo, las estrictas normas que hay que seguir a mi edad para mantenerse a flote le parecen ridículas. Es verdad que lo son. Los padres y madres bromean mucho sobre lo difíciles que nos volvemos cuando pasamos de los doce años. Yo diría que a los once ya estaba todo perdido, es que se dieron cuenta tarde. Ahora, en primero de ESO, con el segundo trimestre avanzado, mis grandes temores se han hecho realidad. Cuando en clase nos enseñan esquemas en forma de pirámide identifico mi lugar siempre abajo. Con los cereales, con el plancton.A esta hora el bloque suele estar muy transitado pero hoy he tenido suerte, tal vez sea un buen augurio. Nadie ha entrado conmigo en el ascensor. Detesto esos momentos con vecinos con los que todo es incómodo. Te dicen fingiendo sorpresa que estás muy grande, te preguntan cómo te va en el colegio cuando no hay tema más tedioso en el mundo, se quedan mirando al vacío pensando en sus propios problemas, y lo agradecería si no se les diera tan mal el silencio. El silencio tiene que ser una cosa elegante, que salga con naturalidad. Si es tenso puede ser incluso peor que una mala conversación. No, nada puede ser peor que una mala conversación. Prefiero pelearme con alguien a quien detesto. Eso tampoco lo tengo muy claro, a menudo me quedo en blanco y las respuestas buenas sólo se me ocurren en la ducha. Cuántas broncas habré ganado mientras me aclaraba el jabón.El espejo del ascensor me devuelve una imagen escuchimizada e insatisfactoria. Chándal gris, mochila azul marino, estatura mediocre, hombros estrechos, algunos granos. A mi edad puedes tener una pinta celestial o te puede tocar esto, lo que nadie quiere, lo que todo el mundo teme, lo más bajo de la pirámide. Hay gente en mi clase que ha echado un porte limpio y estilizado. Será un asunto genético, será una gracia divina. Si te va bien en eso y además te pones la ropa correcta el resto viene solo. A veces la mala suerte se puede suplir a base de ropa o actitud o una buena mezcla de las dos cosas. Mi ropa podría ser peor así que es evidente que lo que termina de hundirme es la actitud. Pertenezco al grupo maldito. De vez en cuando me miro y me lo recuerdo con frialdad. Esta tarde he quedado con una pandilla con la que me solía juntar hace unos años. El curso pasado se empezaron a avergonzar de mí y se han distanciado desde entonces. Debo aprovechar la oportunidad, volver a ganarme su confianza, reconquistar mi lugar. Lo que sí sé es que tengo que cambiarme para luego. No, tampoco, igual piensan que lo estoy intentando demasiado fuerte. Nada está claro si lo piensas dos o tres veces. Las puertas del ascensor se abren. Pronto habré dejado atrás el campo de batalla que supone el espacio público. Mi propia casa es el único lugar medio seguro. El más seguro es mi habitación pero mi madre no me deja que le ponga un pestillo, así que no hay ningún sitio en el planeta en el que me pueda refugiar en condiciones. Podría ser peor. Hay familias más rancias, aunque curiosamente llevarse bien con la familia es algo que no está bien visto, que se considera embarazoso. Un abrazo de tu madre en público te puede hundir. Eso es lo único garantizado, que cualquier pequeña cosa puede hundirte. Supongo que se debe a que las normas las suelen poner los que están más jodidos. De esa frustración, de esa rabia es justo de donde sacan la mayor parte de la fuerza. No es algo que se cumpla a rajatabla. Hay un montón de niños mimados llenos de odio. En realidad no sé de dónde viene. Llamo al timbre. Mi madre abre. Huele a macarrones. Eso está bien. Le sonrío, cierro la puerta, suelto la mochila en el suelo y de repente mi cuerpo se vuelve ligero, uno de los pocos placeres genuinos de cada día. Mi madre está satisfecha porque me ve alegre.—Tienes ganas de macarrones, ¿eh? —pregunta. Me apresuro a sacar el mantel de frutas del segundo cajón de la cocina y corro a poner la mesa dando saltos. Con ella puedo seguir siendo infantil, puedo cantar y bailar sin miedo, pero es complicado porque no sabe distinguir entre la casa y la calle y luego me humilla en público. Como a menudo me hace pasar vergüenza ya tampoco me fío de ella. Si hoy me estoy ablandando es porque la cita de esta tarde me ha llenado de esperanza. Me dijeron que pasarían a buscarme. Si todo se restaurara, si me aceptaran de nuevo tengo la certeza de que incluso mi crecimiento empezaría a comportarse de otra manera. Las cosas iban más o menos bien hasta que renegaron de mí. En aquel momento mi desarrollo se truncó y donde parecía que iba a medir por lo menos un metro setenta me quedé en el sitio criando granos con los hombros juntos y finos. Me pregunto si es una coincidencia pero de verdad que no lo parece. Cuando tus amigos te dejan de lado te pudres y se aprecia desde fuera. A lo mejor es por eso que mi madre dejó de ser oficialmente guapa, porque no supo adaptarse a lo que yo esperaba de ella y mi rechazo la destruyó. A lo mejor si ella no me hubiera avergonzado en público no me hubieran desterrado a mí y nada de esto estaría pasando. Sé que ella nunca ha tenido mala intención, que es muy simpática, pero no ha entendido lo que implicaba que yo pasara de los once años. Lo único que puedo reprocharle es su ingenuidad, que pensara que tratarme como a un bebé frente a mis compañeros de clase, por ejemplo, no iba a tener repercusiones negativas. Pero hoy todo es remediable porque me van a venir a buscar. Procuraré que no se mezclen. Dependerá de mí.Miro el capítulo repetido de Los Simpson en la tele y me regocijo en su estética que en principio resultaba rompedora y ahora desprende la calidez de una foto de hace muchos años, cuando yo era de verdad un bebé en los brazos de una madre joven y guapa. Entonces teníamos derecho a comportarnos con cercanía, con ternura. Ahora algo me empuja a huir de ella. A vece Leer menos
Una novela un poco diferente
El quicio ha sido mi primera toma de contacto con Elisa Victoria y su estreno con la novela ilustrada me ha sorprendido gratamente.El libro hace una radiografia profunda y lucida sobre la pubertad, una de las etapas más importantes y complicadas del ser humano y nos invita a hacer una reflexión sobre ella. El relato es sencillo y complejo y nos ... Leer más
El quicio ha sido mi primera toma de contacto con Elisa Victoria y su estreno con la novela ilustrada me ha sorprendido gratamente.El libro hace una radiografia profunda y lucida sobre la pubertad, una de las etapas más importantes y complicadas del ser humano y nos invita a hacer una reflexión sobre ella. El relato es sencillo y complejo y nos muestra cómo en el transcurso de una tarde es capaz de alterar el devenir de una vida entera.La escritora nos propone un viaje sobre lo cuotidiano y su conexión con los temas trascendentales y consigue reflejar la carga que tiene lo que es aparentemente trivial en una etapa de crecimiento tan importante como es la preadolecencia.Mireia Perez, por su parte, no deleita con unas maravillosas ilustraciones que acompañan los textos hacen la lectura más ligera y bonita haciéndote que te adentres más en la historia.El trabajo de esta ilustradora ilumina el texto y despliega un código repleto de sinestesia y simbología que mezclado con la rica prosa de la autora hace que ambos lenguajes confluyan y generen una estética fascinante, muy potente y detallista. Leer menos
Visión de la adolescencia
Me ha gustado mucho porque es como se siente una chica de 13 años su punto de vista sus miedos ,sus inquietudes ,la vergüenza que siente hacia ciertos comportamientos de su madre,una visión que Elisa refleja muy bien porque asi podemos entender un poco mejor a nuestros hijos ya que  sabemos que la adolescencia es una edad superdificil y muy deli... Leer más
Me ha gustado mucho porque es como se siente una chica de 13 años su punto de vista sus miedos ,sus inquietudes ,la vergüenza que siente hacia ciertos comportamientos de su madre,una visión que Elisa refleja muy bien porque asi podemos entender un poco mejor a nuestros hijos ya que  sabemos que la adolescencia es una edad superdificil y muy delicadada si no sabemos como actuar bien ,eata formandose su personalidad.La choca llega al barrio y ve como todos sus amigos han cambiado ,fuman beben han dejado los estudios y eso ha ellla no la hace ninguna gracia.Llena de valores a tener en cuenta,recomendado papa adolescentes y papas.La portada es preciosa  es ameno y tiene muchos punros divertidos a mi sinvrramente.me ha encamtado.Se le daré tmb para que lo puedan leer mis sobrinos y asi que disfruten de su Lecrura.La choca llega al barrio y ve como todos sus amigos han cambiado ,fuman beben han dejado los estudios y eso ha ellla no la hace ninguna gracia. Leer menos
Aunque tengo algún pero con Alexa, en general estoy muy contento
** Producto y primera conexión **El altavoz en si mismo está muy bien diseñado, una enorme base antideslizante para ubicarlo en cualquier superficie, una sensación sólida en en la palma de la mano y un acabado muy bonito con el acabado mallado de tela. En la parte superior queda el aro led, que parece RGB con unos colores muy bonitos, y cuatro b... Leer más
** Producto y primera conexión **El altavoz en si mismo está muy bien diseñado, una enorme base antideslizante para ubicarlo en cualquier superficie, una sensación sólida en en la palma de la mano y un acabado muy bonito con el acabado mallado de tela. En la parte superior queda el aro led, que parece RGB con unos colores muy bonitos, y cuatro botones con un tacto agradable (más volumen, menos volumen, despertar a Alexa y silenciar micrófono). Sólo tiene una entrada de corriente y una salida de audio jack. La primera vez que lo conectas a la corriente te pide que te bajes la app Alexa para realizar la configuración inicial, aunque por algún motivo desde el móvil me fue imposible realizarla. Sin embargo puedes realizar esta misma configuración con un ordenador con Wi-Fi a través de la web de Alexa y se queda todo funcionando perfecto.** Sonido y conectividad **La verdad me ha sorprendido el volumen y la calidad del sonido del altavoz, recordemos que es el modelo más pequeño, desde luego que no va a convencer a los audiófilos pero no tiene para nada el sonido de lata que me esperaba. Tiene un sonido bastante cálido y redondito y es muy cómodo escuchar las noticias o música en él, me parece ideal para una pequeña reunión de amigos y tener música de fondo. Se escucha con claridad en buena parte de la casa sin tener que subir el volumen al máximo.Respecto a su conectividad, también funciona como altavoz bluetooth (el bluetooth se puede manejar con la voz) y tiene una salida auxiliar, así que si tienes un equipo de sonido medianamente digno en casa, éste es tu dispositivo si lo que quieres es poner Alexa (cable jack no está incluido). Eso sí, ten en cuenta que por muy buen equipo de sonido que tengas, sigues dependiendo de la calidad del sonido en streaming. No he tenido problemas conectándolo por bluetooth al ordenador y al teléfono. Igual hubiera molado también una entrada jack, pero bueno.** Funciones inteligentes y Alexa **Aquí llega lo interesante, porque si no te hubieras comprado un altavoz bluetooth normal.La gracia del ecosistema Alexa son las skills y dependes de ellas para hacer muchas cosas. Por ejemplo, no hay un feed de noticias de Amazon, las noticias las tienes porque te bajas una skill de, por ejemplo, RTVE. Sí tiene por ejemplo su propio servicio del tiempo.*MúsicaEl dispositivo acepta música en streaming de Amazon Music, Spotify (sólo si eres premium), Deezer y TuneIn. Hay una skill de iVoox que es una pena que no esté integrado nativamente en Alexa. Los controles por voz muy bien, la calidad de la música en streaming... pues es la que es, podría ser mejor, pero esto no es algo del Echo, es cosa de los servicios de streaming.*SkillsBueno la tienda de skills está un poco verde y llena de basura. Por ejemplo, hay como veinte aplicaciones de sonidos ambientales diferentes cuando podría haber perfectamente una que las aunara todas, pero eso parece más una opción de esos desarrolladores de crear muchas para saturar la tienda al principio. La tienda irá mejorando. Hay apps de noticias, un par de recetas, otra de cine, apps del tiempo, de curiosidades, juegos y muchas de hogar inteligente (ten en cuenta que cada fabricante usa su propia skill para sus dispositivos).*Hogar inteligenteComo nota, decir que para usar el ecosistema Philips necesitas un Philips Hub a no ser que tengas el Echo Plus que lo trae integrado. Para el resto de dispositivos tienes que bajarte su app asociada. Alexa funciona bien manejando el hogar, dispositivos solitarios o asociados en grupo. Las luces las puedes operar en porcentajes de su brillo o elegir sus colores. Una cosa por ejemplo que NO hace es "Alexa, apaga las luces en cinco minutos", cosa que no entiendo porque sabe perfectamente encender las luces y poner recordatorios de cinco minutos... Pero bueno, irá mejorando. Todavía no es compatible con los FireTV. Los dispositivos se pueden manejar también desde la app de Alexa, si necesitas de ello y no estás en casa.*Asistente personalVoy a empezar por el punto flaco y es que es un poco tonta. Cosas que yo resuelvo con una simple búsqueda en Internet como "Cuándo es el próximo lanzamiento de SpaceX" Alexa simplemente no sabe hacerlo. Le puedes preguntar cosas muy concretas, cosa de enciclopedia podríamos decir, pero eso no y me da rabia porque podríamos decirle "Alexa, avísame un día antes de que estrenen tal obra de teatro" y sería mucho más útil, la gracia de un asistente es organizar tu futuro, no sólo resolver curiosidades. Otra cosa que le falla es el lenguaje natural, necesito expresarle la orden concreta. Por ejemplo, si le digo "20 menos 10" no tiene ni idea de qué le estoy diciendo, tengo que decirle "CUÁNTO es 20 menos 10", irá mejorando.Por lo demás muy bien, se sincroniza con tu calendario de Google, Apple o Microsoft, puedes consultar y añadir eventos a tus calendarios, ponerte alarmas, temporizadores, recordatorios. Puedes también crear listas y añadir elementos en ellas (y luego están disponibles para consutlar también en la app de Alexa), enviar mensajes o llamar directamente a otros contactos tuyos que también tengan Alexa ("Alexa, dile a mi padre que el viernes me paso después del trabajo").Otra cosa interesante son las rutinas, una suerte de IFTTT que dado un evento (Una frase que le digas a Alexa, una hora del día o un evento desde un dispositivo compatible) realiza una acción. Por ejemplo, en mi caso, si le digo "sexy time" me baja las luces, las pone en rojo y pone a Barry White (tenía que probarlo jaja). Las rutinas tienen que mejorar, poder poner disparadores de eventos, por ejemplo que las skills puedan interactuar con este sistema.*Otras cosisPuede leer algunos libros de tu Kindle, los compatibles, con una perfecta voz de robot. El anillo de luz se ilumina más claro en la zona de donde proviene tu voz. El modelo más pequeño cuenta sólo con cuatro micrófonos en lugar de siete de sus hermanos mayores. Cuando no escucha el anillo es rojo.** Conclusiones **Es un dispositivo con un buen sonido e imagino que los demás de la familia Echo también lo serán. Si de paso quieres aprovechar para poner un altavoz en casa, ve a por un modelo más caro. Si no vas a estar poniendo música todo el día, el más pequeño es más que suficiente con su calidad de sonido.Es útil para manejar el hogar inteligente, muchos fabricantes son compatibles con el ecosistema de Alexa y cada vez hay más dispositivos que se puedan conectar. Es una plataforma con mucho potencial.Como asistente personal bien a la hora de manejar tu calendario, poner música, recordatorios, avisar a otro amigo con Alexa, y demás comentado arriba. Lo único es que es un poco tonta para buscar cosas en Internet y que le falta pulir el lenguaje natural, pero ésto irá mejorando con los meses. Muy contento, muy curioso el invento, ahora poco a poco a ir haciendo Alexa y la casa más inteligentes. Leer menos
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