Situado en un barrio londinense de inmigrantes, el inmenso fresco humano que dibuja la autora tiene como epicentro las familias de Archie Jones y Samad Iqbal, dos ex combatientes de la Segunda Guerra Mundial que vuelven a encontrarse despues de treinta años sin verse. Archie está casado con una jamaicana exuberante y Samad con Alsana, bengalí como el, y con las ideas muy claras. Pero lo más preocupante no es estar casados con mujeres jóvenes de carácter endemoniado, ni la falta de dinero, ni las secuelas de la guerra; no, la prueba más dura es la relación con sus hijos, que a la hora de llevar a cabo los proyectos fracasados de sus padres se rebelan: se rebelan contra el racismo británico, contra su propia clase social, incluso contra su barrio, sus orígenes, y su historia. Así, cada uno a su manera, son la prueba viviente de lo difícil que resulta escapar de un destino trazado de antemano.
La crítca ha dicho...
«Un debut que asombra por su consistencia, divertido y serio a la vez; la voz tiene auténtico timbre literario. Dientes blancos me encantó y me impresionó. Tiene garra.»
Salman Rushdie
«Un prosa ácida, lujuriosa, eléctrica. Zadie Smith es una Dickens de la era postcolonial.»
L'Express
«Un nuevoy gran talento. Un optimismo mordaz e irreverente sin ser frívolo, comprometido y entretenido a la vez.»
The Guardian
«Smith mantiene el tipo con una confianza y energía desbordantes, exentas de falsedad. Al acabar el día, hay motivos para alegrarse, y este elocuente y divertido libro es uno de ellos.»
The New York Times Book Review
«Una gran novela sobre grandes temas; un relato ingenioso, de aguda inteligencia y comicidad.»
The Bookseller
«Aguda, fluorescente y polifacética, la novela de Smith recuerda a las obras de Rushdie: extremadamente contemporáneas y sin embargo imbuidas de contenido histórico.»
Publisher's Weekly
«Hilarante, poliédrica y, a la vez, sumamente inteligente, profunda y madura opera prima.»
Qué Leer
«Dientes blancos es una novela ciertamente ambiciosa, nutrida de un potencial narrativo que denota un sorprendente poderío.»
El País
«Dientes blancos deja el buen sabor de boca y la frescura de un excelente elixir; divierte y permite imaginar un Londres no tanbritánico, menos victoriano y caduco; un imposible té de las cinco servido en porcelana exótica con el humor de Woody Allen.»
El Correo