La verdadera explicación (Fixed Layout)

Pablo Bernasconi

Fragmento

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Por accidente. Todo empezó por accidente. Resulta que se encuentran en esa desesperante página negra que es el espacio un poco de luz, que venía de quién sabe dónde, y bastante de oscuridad, que ya estaba ahí desde hacía un buen rato.

La luz, siempre apurada, se choca con la oscuridad porque andaba distraída y no la había visto. Y se pega tal porrazo que desparrama millones de partículas en infinitas direcciones. Estas partículas picaron a la oscuridad y la llenaron de ronchas luminosas. Algunas se curaron rápido y se apagaron tragadas por la penumbra, pero otras continuaron prendidas y se esparcieron por todo el espacio creciendo y creciendo hasta convertirse en planetas, las más pequeñas, y en estrellas, las más grandes. Algunas ronchas-planeta se juntaron con algunas ronchas-estrella y formaron ronchas-galaxias, dentro de las que pasaron cosas de lo más sorprendentes.

La Tierra fue una de ellas.

Luego vinieron las lluvias y los océanos, las plantas, los peces, los dinosaurios, los perros, los gatos, las señoras, los cascarudos, los señores, las arañas...

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Recuerdo que una vez me picó una araña marrón cerca del ombligo, y como tenía un veneno y yo tenía una alergia, el pequeño puntito colorado que dejó el bicho se convirtió en dos, luego en tres, cuatro, nueve, cuarenta... Y cuando me quise acordar estaba todo lleno de puntitos, en la panza, en los brazos, en la cara... ¡Un desastre!

Yo pensé: “Si estoy todo lleno de puntitos por fuera, quizá también lo esté por dentro”. Y me asusté bastante. El médico me dijo que no me preocupara, que era superficial, cutáneo y no sé qué más, y me puso una inyección.

Al rato se me fueron los puntitos y lo único que quedó fue la marca del primero, donde me había picado la araña. Todavía la tengo.

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La risa proviene de un antiguo y peligroso virus: el risotto. Se cree que apareció hace unos 6500 años, por pinturas y esquemas donde se lo identifica con toda claridad. Aparentemente, el primer huésped de este flagelo fue una niña africana de unos cinco años, con cosquillas. Aunque se desconoce la forma original del bicho luego de tantas mutaciones, su aspe

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