Hay que enseñarle a tejer al gato

Ema Wolf

Fragmento

Hay que enseñarle a tejer al gato

Éste es un buen mes para enseñarle a tejer al gato.

Así que nada de excusas, nada de dejar las cosas para más adelante. Si nos dejamos atrapar por la pereza, ¿qué podemos esperar del gato luego?

Lo primero y más importante es, naturalmente, tener un gato. Hay muchas personas que ya lo tienen, hasta sin haberlo buscado. Los gatos se tienen con facilidad.

En caso de que a alguien le falte gato, ya sabe lo que debe hacer para conseguir uno: ir con una albóndiga cruda al baldío más cercano y gritar “mish”.

O bien pedírselo directamente a quien le sobren gatos. Sobran personas a las que les sobran gatos. Es el caso de mi prima Aída, que en Pascua los regala como huevos.

Cualquier gato puede aprender a tejer. Quiero decir: no es necesario que el gato sea fino. Los gatos ordinarios o cirujas son igualmente aplicados y bastante menos inútiles.

Escuché por ahí que los gatos zurdos son los más hábiles para el

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