La Torre de Babel

A.S. Byatt

Fragmento

Contents
Índice
Portadilla
Índice
Dedicatoria
Citas
Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Agradecimientos
Notas
Biografía
Créditos
Grupo Santillana
03_Dedicatoria

Para David Royle

04_Citas

Su Estación Telepática transmite ondas de pensamiento que los mediocres, los aburridos, los desilusionados, así como cualquiera que esté cansado o inquieto, son capaces de percibir.

Entonces, aunque no figure en atlas ni guías, su Jardín es fácil de encontrar. En un abrir y cerrar de ojos se llega a la puerta, donde está escrito en grandes letras: HACED EL AMOR, NO LA GUERRA.

*

Ella no maltrata a sus víctimas (las bestias morderían o huirían): las reduce a flores, fatalistas sésiles a las que nada molesta y que sólo hablan consigo mismas. Pequeños míos no demasiado inocentes, desconfiad de la vieja Abuela Araña; desoíd sus ternezas. No es tan gentil como parece, ni vosotros tan fuertes como creéis.

W. H. AUDEN, Circe

La Nature n’a qu’une voix, dites-vous, qui parle à tous les hommes. Pourquoi donc que ces hommes pensent différemment? Tout, d’après cela, devait être unanime et d’accord, et cet accord ne sera jamais pour l’anthropophagie.[1]

MME. DE SADE, Carta a su marido

Me temo que no nos desembarazamos de Dios porque aún creemos en la gramática.

NIETZSCHE

05_Prologo 06_Capitulo 1

1.

O bien podría comenzar con Hugh Pink paseando por los bosques de Laidley, en el Herefordshire, en el otoño de 1964. Los bosques son en su mayor parte una foresta virgen encerrada entre laderas de montañas, pero Hugh Pink sigue un sendero bordeado de añosos tejos que discurre sombrío por colinas y valles.

Sus pensamientos zumban en torno a él como una nube de insectos de diversos colores, tamaños y grados de agitación. Piensa en el poema que está escribiendo, de un rojo cálido como un panal, un poema sobre una granada, y piensa en cómo ganarse la vida. No le gusta enseñar en una escuela, pero así es como se ha mantenido últimamente, y, en medio de los

Suscríbete para continuar leyendo y recibir nuestras novedades editoriales

¡Ya estás apuntado/a! Gracias.X

Añadido a tu lista de deseos