Mika Sofi BOMS 2 - Una sorpresa explosiva

Mika Sofi BOMS

Fragmento

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Jamás de los jamases me despierto antes que mi hermano Mika. ¡Never! Es una norma inquebrantable en el mundo de Sofi Boms. O sea, ¡en el mío! ¡The best world! El caso es que... ¡Bombazo informativo! Alguien ha incumplido esa regla y no os vais a creer quién ha sido.

Si habéis pensado en Mika, ¡fail máximo! ¡Porque he sido yo! Pero ¿no dicen que las normas están para romperlas o algo así? Pues, como ya habréis comprobado, ¡soy top en hacerlas picadillo!

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Antes de arreglarme y desayunar, me marco un bailecito encima de la cama. Bueno, bailo, salto y casi hago un triple tirabuzón en el aire. Oro en la categoría Madrugón.

No son ni las siete y media de la mañana y ya estoy ready para ir a la Top Academy, ¡la mejor academia artística del universo entero! Estoy segura de que ni los extraterrestres tienen un sitio tan guay donde aprender geografía y moda a la vez.

—Eeeeeeh, ¿WHAT?

Ese es Mika, acaba de aparecer y está flipando a niveles estratosféricos porque he madrugado. Todavía está desayunando y me mira como si me hubiera calzado las macetas del jardín en vez de mis superbambas. ¡Me costó dos semanas pintarlas de mil colores y ponerles todo tipo de adornos!

La cara de bobo que se le ha puesto a Mika me tiene living. ¡Ni siquiera pestañea! Se ha quedado petrificus totalus y, juro por todo mi maquillaje, que no he hecho ningún encantamiento a lo Harry Potter.

¿Qué dicen mis diagnósticos? Es un caso evidente de Zasca Boms. Mika solo necesita que lo resetee. El crac de la tecnología es él, pero sé cómo reiniciarlo para que vuelva a funcionar con normalidad. Le quito el vaso de leche y finjo que voy a tirárselo por encima de su camiseta favorita:

—¡Permiso denegado! —reacciona Mika por fin, cogiendo el vaso para detenerme—. ¿¡Estás majareta!? Bueno, no es una pregunta: ¡estás majareta!

Mi hermano se bebe la leche tan deprisa que tose y una parte se le escapa por la nariz. No puedo evitar reírme, mientras él se limpia con cara de malas pulgas. ¡Hasta sus pulgas están enfadadísimas!

—¡Tú nunca madrugas! ¿Cómo lo has conseguido? No habrán vuelto los clones, ¿verdad? —me pregunta Mika, ahora poniendo una cara de suspicious total.

¿Clones otra vez? ¡No, por favor y gracias! El medidor de locura de los hermanos Boms explotó con aquella aventura.

—Existe un objeto que se llama despertador. ¿Te suena o te has quedado atrapado en el siglo XII? —le chincho.

¿Le está subiendo la fiebre o está poniéndose rojo por el mosqueo? ¡Casi echa humo por las orejas, como una olla exprés!

—Eres... eres... ¡Te vas a enterar!

¡S.O.S.! Mi hermano me persigue por toda la casa y yo grito a unos decibelios que podrían romper los cristales de todas las ventanas. Pero lo único que rompemos es la paciencia de mamá. En comparación con lo roja que está ella, el color de Mika es rosa chicle.

—¡Menudo caos estáis armando! —nos riñe—. Terminad de prepararos, que aún llegaréis tarde a la Top Academy.

—Sí, mamá —decimos al unísono como dos cachorritos indefensos.

Está claro que no se lo cree. Y es que, a ver, nos conoce desde que nacimos. ¡Obviamente!

—El último que llegue al coche sin abrir los ojos hace los deberes del otro durante un mes —lo desafío.

—¡Hecho!

Nuestros challenges no han cambiado ni un pelo. Después de trescientos golpes y un pisotón doble a mi padre, llegamos al coche. También nos subimos a la vez, uno por cada lado, pero ¡nos hacemos un lío! y terminamos enredados con los cinturones de seguridad.

Rápido, ¡pedid un deseo! Que Mika y yo coincidamos en algo a la primera es un milagro irrepetible o una situación en peligro de extinción.

Sorprendentemente, no nos chinchamos más hasta que mamá nos deja en la Top Academy. Todos los alumnos están muy nerviosos y no es para menos porque...

Un segundo, ¡STOP todo el mundo! Todavía no os he contado por qué he conseguido madrugar (sí, la cosa tiene truco), por qué mi hermano y yo nos hemos vestido más cool de lo normal (si eso es posible) y por qué hoy la academia está tan emocionada (¡lógico!).

Aunque mantener un poquito más el hype no hace daño, ¿verdad?

—Fijo que nos elegirán a nosotros —me dice Mika mientras entramos en el edificio.

—¡No es ningún secreto que os tocará a vosotros! —Nuestro amigo Carlos aparece a nuestro lado de repente.

Carlos es un genio del diseño gráfico, pero cuando se viste parece que está un poco loco. ¿Quién puede llevar bufanda de lana y manga corta en pleno otoño?

Deseando que tenga razón, cruzo los dedos de las manos ¡e incluso los de los pies!

Como siempre que dan noticias importantes, nos reunimos en el gran auditorio. ¡OMG, todos los profesores están en el escenario! La directora Claudia, de pie delante de un atril, espera a que nos sentemos para empezar:

—¡Buenos días, Top Academy!

Aplaudimos como si nos fueran a regalar mil millones de euros. Pero lo que va a anunciar mola mucho más.

—Como sabéis, cada dos años, organizamos algo muy especial para vosotros... ¡El Top Trip! Un viaje en el que los alumnos más sobresalientes de todas las Top Academy del país asisten a talleres, participan en actividades, hacen excursiones y perfeccionan sus habilidades artísticas en la academia más prestigiosa del mundo: la Top Academy de Londres.

Esta vez chillamos tan alto que casi me quedo afónica.

—Pero hay algo más —dice la directora Claudia con una enorme sonrisa.

Madre mía, ¿una sorpresa? ¿Algo nuevo que no han tenido los Top Trips anteriores?

—En esta edición, el alumno que obtenga más puntos en las diferentes actividades, conseguirá un premio.

¿Alguien está haciendo un redoble de tambores o es mi corazón a mil por hora?

—¡Crear su propia marca! Con merchandising, giras internacionales y todo lo que podáis imaginar.

¡Llamad a una ambulancia! ¡Mika y yo estamos a puntito de desmayarnos!

—Y ya sabemos qué alumnos sobresalientes representarán a nuestra academia en el Top Trip de este año: ¡Mika y Sofi Boms!

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