Hermana de hielo

Jude Deveraux

Fragmento

Creditos

Título original: Twin of Ice

Traducción: Claudia Ferrari

1.ª edición: diciembre, 2015

© 2015 by Deveraux Inc.

© Ediciones B, S. A., 2015

Consell de Cent, 425-427 - 08009 Barcelona (España)

www.edicionesb.com

Diseño de cubierta: Estudio Ediciones B

Fotografía de cubierta: JupiterImages Corporation

Diseño de colección: Ignacio Ballesteros

ISBN DIGITAL: 978-84-9069-266-0

Maquetación ebook: Caurina.com

Todos los derechos reservados. Bajo las sanciones establecidas en el ordenamiento jurídico, queda rigurosamente prohibida, sin autorización escrita de los titulares del copyright, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía y el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares mediante alquiler o préstamo públicos.

Contenido

Contenido

Portadilla

Créditos

 

Prólogo

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Prólogo

La mujer, anciana y gorda, de cabello gris y dientes ennegrecidos se sentó con agilidad en el asiento del carro. En la parte de atrás llevaba una variedad de verduras frescas cubiertas con un toldo húmedo.

—Sadie.

Ella se volvió hacia la izquierda para mirar al reverendo Thomas; un hombre alto y apuesto que ahora tenía el ceño fruncido.

—¿Te portarás bien? ¿No harás ninguna tontería ni llamarás la atención?

—Lo prometo —dijo Sadie con un tono de voz suave y juvenil—. Regresaré pronto. —Azuzó los caballos y se echó a andar.

El camino desde Chandler, Colorado, hasta la mina de carbón era bastante largo. Una vez allí, tenía que aguardar que uno de los trenes pasara por alguna de las líneas de Colorado y Southern Railroad. Cada uno de los diecisiete campos de carbón de los alrededores de Chandler tenía su propia línea de ferrocarril.

Cerca de la mina de Fenton, Sadie se cruzó con otro carro guiado por una mujer anciana. Sadie detuvo sus cuatro caballos para estudiar el paisaje.

—¿Algún problema? —preguntó Sadie a la mujer.

—Ninguno, pero cada vez se habla más del sindicato. ¿Y tú?

Sadie asintió.

—Oí que hubo una pelea en el túnel número seis la semana pasada. Los hombres no se toman el tiempo para salir a la superficie cuando excavan. ¿Tienes un poco de menta?

—Lo vendí todo, Sadie —dijo la mujer acercándose más—. Ten cuidado. La Pequeña Pamela es la peor de todas. Rafe Taggert me da miedo.

—Muchos le tienen miedo. Aquí viene otro carro. —Su voz se hizo más grave cuando ordenó a los caballos que se pusieran en movimiento—. Hasta la semana que viene, Aggie. No aceptes monedas falsas, ¿eh?

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