Cómo dormir mejor

María Fernanda López

Fragmento

Introducción

Hay infinidad de leyendas y mitos sobre el tema del sueño. Podríamos hablar sobre Baku, un espíritu benevolente que nos visita en el medio de la noche y devora nuestras pesadillas mientras dormimos para así protegernos de los terrores de los malos sueños, según cuenta la leyenda japonesa. O de Mara, el espíritu maligno que se sienta sobre nuestro pecho mientras estamos durmiendo y convierte en pesadillas nuestros sueños. O de la leyenda de Asibikaashi, la mujer araña, que le permitió a la tribu Ojibwe construir su propio “atrapasueños”, semejante a una telaraña para proteger a todos sus miembros de las pesadillas. Y, por supuesto, no nos olvidemos de Morfeo, el dios griego, quien vela porque tengamos buenos y dulces sueños. ¿Quién no ha dicho alguna que otra vez, y con sumo placer, que se va a entregar a los brazos de Morfeo cuando piensa en gozar de un descanso placentero?

Pero dejando las leyendas de lado, también en la literatura el sueño encontró su lugar. Veamos dos claros ejemplos. Uno es Lewis Carroll, el autor del maravilloso libro “Alicia en el país de las maravillas”, que basa toda la historia en el sueño. La misma comienza cuando Alicia se queda dormida en el jardín de su casa y ve pasar a un conejo blanco corriendo. Hasta ahí no hay nada extraño, pero lo que le llama la atención es que va hablando, vociferando que llega tarde. El conejo saca de su chaleco un reloj para mirar la hora y luego se mete en el hueco de un árbol. Alicia, sin poder creer lo que está viendo, decide seguirlo. Y allí comienza la mágica historia, llena de personajes asombrosos, que termina cuando Alicia despierta de su sueño. El otro ejemplo lo vamos a obtener desde la ciencia. Es imposible hablar de sueño sin nombrar a Sigmund Freud, quien revolucionó el tema con su libro “La interpretación de los sueños”. Freud plantea a los sueños como la realización alucinatoria del deseo y como una vía privilegiada de acceso a nuestro inconsciente. Emplea el método de interpretación de los sueños a través de la asociación libre de los símbolos más importantes del mismo. Todos nuestros sueños tienen una razón de ser, no se dan porque sí.

Dejemos las palabras y vayamos a las imágenes, mejor dicho, a las películas, y veamos otros dos ejemplos. ¿Quién no recuerda a Leonardo Di Caprio atravesando los distintos niveles del sueño, teniendo mucho cuidado de no quedar atrapado en un limbo, en la película “Origen (Inception)”? Su trabajo era el de un llamado “extractor”, una persona que se introduce en los sueños de sus víctimas con el objetivo de extraerles los secretos relacionados al mundo de los negocios y venderlos al mejor postor por grandes sumas de dinero. O ¿quién no ha tenido realmente miedo a dormirse luego de ver la saga de la película “Pesadilla”, con el terrible Freddy Krueger con su remera de manga larga a rayas horizontales rojas y verdes, su cara desfigurada, su sombrero desgastado y su guante de cuero con aquellas larguísimas garras metálicas? Todos los adolescentes de la década del 80 mirábamos entre maravillados y aterrorizados sus terribles andanzas. Hemos pasado noches sufriendo por si “se aparecía” en nuestros sueños. Tanto miedo le llegamos a tener que fuimos capaces de disfrutar de la película “Freddy vs. Jason” solo para verlo sufrir a Krueger.

Podríamos seguir eternamente hablando de leyendas, escritores y películas que giran alrededor del tema. Pero lo importante es que veamos la importancia y el rol que siempre tuvo el sueño en la vida y en la historia del hombre.

Hoy en día, en todos los medios de comunicación el tema del sueño tiene un lugar destacado. Ha logrado ocupar un espacio muy importante en el área de la salud, tan importante que hasta hay una especialidad que se dedica exclusivamente a él llamada Medicina del Sueño, que tiene un rol fundamental en la práctica clínica moderna.

Sabemos, y vamos a ir descubriendo a lo largo de este libro, que el dormir es fundamental en nuestra vida, que es una de las actividades más importantes que realizamos los seres vivos. Nuestra calidad de vida está íntimamente relacionada con nuestra calidad de sueño. El mal dormir tiene repercusiones directas en nuestra salud, así como nuestra salud impacta sobre nuestro sueño. Ya está demostrado que no solo se dan durante el dormir toda una serie de procesos que ayudan a que los niños crezcan y los adultos restauren y reparen sus tejidos, sino que además nuestro cerebro, que sigue activo, procesa información, la consolida y resuelve situaciones. En definitiva, tiene un rol importante en nuestra memoria y nuestras Funciones Cognitivas.

El tema sueño es muy amplio y no es posible compactarlo ni resumirlo en un solo volumen. Tendríamos que armar varios tomos para intentar volcar todo lo que se ha descubierto sobre él y aun así no estaría completo, porque se continúa investigando y se van descubriendo nuevas cosas todo el tiempo.

La idea de este libro es aproximarnos al tema sueño, ir descubriendo para qué sirve, cómo es el proceso del mismo, cuanto tiempo es el que necesitamos dormir para despertarnos descansados y listos para arrancar una nueva jornada. Ver cómo va cambiando a lo largo de toda nuestra vida. Intentar descubrir cuáles son los trastornos más habituales del sueño, reconocer sus síntomas y la necesidad de consultar a un especialista en forma temprana. Sacarnos la duda si dormir la siesta es bueno o no, qué ventajas y desventajas tiene. Tener en cuenta que el dormir no es solamente acostarnos y apagar la luz, sino que requiere que preparemos el ambiente para ello, controlando el nivel de luz y de ruidos, la temperatura, con un colchón adecuado a nuestro cuerpo y hasta con el cuidado de los colores que utilizamos para decorar nuestra habitación. También es conocer la importancia de dormir para nuestro cerebro, para consolidar nuestra memoria; un mal descanso va a repercutir en nuestro rendimiento intelectual, laboral y en nuestro estado anímico. Y saber que consumir determinadas bebidas o alimentos puede alterar su arquitectura, al igual que el uso de algunos medicamentos, la ansiedad, el estrés, la depresión, la obesidad y los problemas endocrinológicos, entre otros.

Este libro nos brindará una guía de los malos hábitos que tenemos que eliminar de nuestra rutina y una serie de consejos que nos ayudarán a mejorar la calidad de nuestro sueño. Nos ayudará a tirar por tierra todos aquellos mitos que hay alrededor del tema y que, al llevarlos a cabo, terminan perjudicándonos en lugar de beneficiarnos. También encontraremos una serie de cuestionarios para que chequeemos nuestro dormir y veamos si tenemos alguna dificultad como para concurrir a un especialista para corroborarla o descartarla. Es importante que tengamos en cuenta que nunca debemos automedicarnos ya que podemos terminar enmascarando nuestras dificultades y acentuando el trastorno. Veremos la relación entre sueño y manejo y la importancia de descansar antes, durante y después de viajar. Y, por último, tendremos una noción de cuáles son los estudios más habituales que se realizan para ayudar al profesional a cono

Suscríbete para continuar leyendo y recibir nuestras novedades editoriales

¡Ya estás apuntado/a! Gracias.X

Añadido a tu lista de deseos