- ¿Nos necesitan mientras tienen miedo?
Muchos padres y madres pensamos en alguna ocasión que, si estamos muy pendientes de nuestros hijos cuando tienen algún miedo, su temor se acentuará. Pero es un error creer que ellos solos van a poder gestionar sus emociones. Definitivamente nuestros hijos necesitan nuestra compañía y ayuda para superar esos miedos y que no se conviertan en algo crónico.
- ¿Es contraproducente que duerman con los padres?
Al ser humano le gusta y necesita dormir acompañado. Dormimos con nuestra pareja, dormimos con nuestras mascotas... ¿Por qué no dormir con nuestros hijos cuando necesitan estar acompañados para superar una mala noche? Por cuestiones biológicas, para dormir necesitamos estar completamente relajados. Si nuestro cerebro siente que está en peligro, necesitaremos la seguridad de una compañía que pueda protegernos en caso de peligro. (Recuerda los miedos imaginarios de los que hemos hablado antes.)
- ¿Cuándo terminan los miedos?
Los miedos no acaban nunca, sino que se transforman según la edad o la etapa de crecimiento.
- ¿Qué actitud debemos tomar los padres ante los miedos de nuestros hijos?
Cuando decidimos acompañar a nuestros hijos en el miedo, hemos de hacerlo sin juicios. Nuestro propio miedo hace que queramos que ese miedo pare. Sin embargo, esa decisión de acompañar a nuestros hijos significa «saber estar» a su lado en ese camino. Paciencia, respeto, gestos físicos afectivos (caricias, abrazos, etc.) o verbalizar ese miedo son algunas de las mejores maneras de acompañarles en esa fase.