Quién es la chica

Tomás Balmaceda
Agustina Larrea

Fragmento

A veces

Autor: Andrés Ciro Martínez

Intérprete: Los Piojos

Disco: Chac tu chac

Año: 1993

Incluso las estrellas de rock tuvieron adolescencias complicadas por amores imposibles. Durante todo su colegio secundario, Andrés Ciro Martínez estuvo detrás de una chica que no estaba interesada en él. “Se llamaba Irene y es una de las mujeres más importantes de mi vida. No me daba bola, le escribía cartas, canciones, era compañera de la escuela y melliza de mi mejor amigo. Él me decía: ‘Nunca te va a dar bola, le gustan los tipos más grandes y con plata’”, reveló. Sin embargo, el joven Martínez no dio el brazo a torcer y pensó un plan para conquistarla. “Le generé esa necesidad, como dice Benedetti en el poema Táctica y estrategia”, confesó. El método elegido fue escribirle una carta en la que se despedía de ella. “Estar cerca de vos me hace mierda”, le confesó, dolido. La apuesta rindió frutos y la difícil Irene cedió: “Era una histérica terrible, me volvía loco. Ocho años estuve detrás de esa chica, tenía etapas en las que me gustaba otra, pero siempre volvía”. Una vez que la conquistó, salieron cuatro años y fue él quien la dejó.

Esas idas y vueltas quedaron plasmadas, entre otras canciones, en A veces del disco Chac tu chac, que marcó el debut de Los Piojos.

Al fin nena

Autor: Juan Sebastián Gutiérrez (Juanse)

Intérprete: Los Ratones Paranoicos

Disco: Furtivos

Año: 1989

Ninguno de los dos habló jamás en público de este romance, pero el amor entre Juanse y la actriz Sandra Ballesteros a fines de la década del 80 influyó mucho en ambos. Ella se convirtió en la musa de muchas de las canciones de Furtivo, el tercer álbum de Los Ratones Paranoicos, y él se puso más romántico en sus letras de influencia stone. La placa, producida por Gustavo Gauvry, no sólo contó con la primera participación de quien muchos años después sería su bajista, Fabián el Zorrito Von Quintiero, tocando el hammond en Lobo echó, sino que la misma Ballesteros, bajo el nombre Sandy, le pone su voz a los coros de Al fin nena, un tema que Juanse le dedicó. El suceso de este álbum puso a Los Ratones Paranoicos en las radios de rock y le permitió tocar por primera vez en el estadio Obras Sanitarias para cinco mil fanáticos.

El éxito de la banda y el crecimiento de la carrera de la actriz desgastaron la relación y le pusieron un fin, pero sus vidas seguirían vías paralelas. En 2010 Ballesteros decidió dejar la televisión para transitar el camino de la espiritualidad, yéndose a vivir varios meses a la India, mientras que algún tiempo después Juanse abandonó los excesos y se convirtió al catolicismo. “Descendí y conocí el infierno y sus derivaciones, y no es que me arrepienta, pero ya no tengo nada que ver. Ahora me entregué a Dios. Mi creencia se profundizó. Yo me tomé una cancha de River de cocaína hasta el borde, pero el destino me hizo madurar”, reveló.

Ala delta

Autor: Ricardo Mollo

Intérprete: Divididos

Disco: Acariciando lo áspero

Año: 1991

El romance entre los músicos Ricardo Mollo y Érica García tuvo sus frutos artísticos. Según la cantante, a lo largo de los diez años de relación con el líder de Divididos hay dos canciones de la banda que marcan el comienzo y el final de la pareja. “La del principio es Ala delta. Es una de las mejores canciones del rock argentino. Por eso yo no veo como un chusmerío contar que es para mí. Me siento parte de la historia de la música, más allá de las canciones que yo compuse. Como musa son como medallas que me quedan a mí. Entonces es importante. Porque aparte también a la gente le gusta saber de dónde salen las cosas. Es muy rico eso para una persona”, explicó.

Sobre el surgimiento del tema, Érica recuerda que hacía pocos meses que habían empezado a salir. “Existía el casete todavía. Divididos grababa todo, absolutamente todo, hasta los ensayos. Y de los ensayos salen las canciones que ellos hacen y tocan. Ricardo me trajo ese ensayo que habían grabado. Me vino a buscar a Palermo y me llevó a una placita de Palomar. Entonces ahí me mostró: ‘Mirá lo que hicimos hoy’, enloquecido. Yo escuché eso y no lo podía creer”, aseguró.

Pero el tema de entonces no era igual al que se conoció después: “El primer Ala delta tenía la letra en inglés, algo así como ‘There is a lady in the sky’. Entonces él tradujo lo que se le ocurría, lo que salía por fonética. Y dice tal cual ‘una chica en el cielo, vive en mi océano salvaje’. Y fue así como ¡wow! Nos hacía acordar al primer Pink Floyd de Syd Barrett”.

García, también dedicada a la composición, analizó: “Lo que pasa también con las canciones, incluso con las que he escrito yo, es que no son dedicadas a alguien tipo ‘ay, te dedico, mi amor’. Muy difícilmente salgan así. Pero sí salen inspiradas por alguien y se dedican a una persona y como que toda la energía de esa canción está puesta en eso. En este caso específicamente dice: ‘Una chica en el cielo’. Bueno, la chica era yo”.

Alicia de Morón

Autor: Hilda Lizarazu y Tito Losavio

Intérprete: Man Ray

Disco: Piropo

Año: 1995

En 1995, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Eduardo Duhalde, fijó mediante un decreto que todos los locales nocturnos dentro de su territorio debían cerrar sus puertas a las tres de la mañana. La medida causó inmediato rechazo en los jóvenes y en varias bandas de rock, que dieron su opinión en temas como El mono relojero de Kapanga. Fue en esa época que Hilda Lizarazu escribió junto a Tito Losavio Alicia de Morón. “Me imaginé a una chica a la que ese decreto le había generado una gran fricción y que llamaba a las radios porque quería que alguien la escuchara ya que no podía salir”, contó la intérprete. Es su voz la que canta “se llama Alicia y dice ‘alguien que me escuche, alguien que responda a esta señal’. Alicia vive en Morón, ya no la dejan salir, si hay que volver a las tres se queda viendo MTV”.

El tema se convirtió en el más popular de Piropo, el quinto disco de Man Ray. “La composición habla de una fan nuestra, de esas que llamaban a la radio para pedir temas, nos seguía a todos lados, vino a todos los conciertos, una chica a la que realmente le gustaba mucho lo que hacíamos. Recuerdo que hasta llegó a viajar a Ushuaia por sus propios medios para ir a vernos en una gira”, r

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