En Malaia Starogradovka, un pueblo de apenas tres calles en la zona gris de Ucrania, la tierra de nadie disputada en 2014 entre las fuerzas ucranianas y los separatistas prorrusos, solo quedan dos residentes: Serguéi Sergueich, inspector de seguridad retirado convertido en apicultor, y Pashka Jmelenko, amigo y rival suyo desde sus días de escuela. Sin electricidad, con poca comida y bajo la constante amenaza de los bombardeos, el único placer que le queda a Sergueich son sus abejas, aletargadas por el invierno.
Con la llegada de la primavera, tendrá que alejarlas de la zona gris para que puedan recolectar su polen en paz, una misión que lo llevará a conocer a combatientes y civiles de ambos lados de la línea de batalla. Su bondad y su impecable brújula moral irán desarmando a todos los que se crucen en su camino, convirtiendo la salvación de sus abejas en una metáfora sobre la vida en tiempos de guerra.
«En el caso de Kurkov vemos a un especialista en colocar a sus antihéroes en paradigmas que les obligan a enfrentarse a disparates o aventuras tan insólitas que normalizan a fuerza de implicarse en ellas».
Toni Montesinos, La Vanguardia
«Un personaje absolutamente entrañable».
Francisco Bescós, Librotea
«Esta novela es el sueño de una esperanza hoy rota: [...] un Kurkov pegado al presente, sutil e introspectivo».
Marta Rebón, El Mundo
«Humor para contar el drama de Ucrania. [...] Ideal para los que gustan de la literatura del absurdo, donde el protagonista es una caricatura del ser humano colocado en circunstancias entre cómicas y kafkianas».
Toni Montesinos, La Razón
«Uno de los más grandes escritores ucranianos vivos. Su prosa, marcada por el humor y una contagiosa humanidad, tiene ecos del realismo mágico y el absurdo. Pero también la llenan inmensas porciones de realidad».
Jorge Ferrer, El Mundo
«Una novela que retrata la dura realidad de la invasión rusa y emociona al lector en medio de un escenario incierto».
El Mundo
«Una deliciosa y cruda novela [que] tiene la vigencia de lo premonitorio».
Francisco Carrión, El Independiente
«El hombre más divertido en el lugar menos gracioso».
Elena Hevia, El Periódico
«Una novela donde los sentimientos, los gestos, las palabras y su entonación son los pequeños matices en los que cobra vida la rutina de sus dos personajes».
Javier Feito Blanco, Zenda
«Aunque se basa en la cruda realidad de la guerra, Abejas grises se lee por momentos como una fábula».
Keith Gessen, The New Yorker
«Un libro cálido y sorprendentemente divertido del mejor novelista vivo de Ucrania».
Charlie Connelly, New European
«Una especie de Kurt Vonnegut ucraniano».
Ian Sansom, Spectator
«Un Kafka postsoviético».
Daily Telegraph
«Una obra atravesada por humor e ironía».
Mercedes Monmany, ABC